La ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, ha dejado la frase polémica del día y lo ha hecho en un acto que ha celebrado en Málaga. Sus competencias son de las más relevantes de la legislatura por el gran problema de vivienda que existe en el país. No obstante, una de sus primeras declaraciones ya dio que hablar. Rodríguez hizo referencia entre sus prioridades a proteger las segundas viviendas, lo que se conoce como 'la casa de la playa'.
Sus palabras este viernes han sido aún más controvertidas. Además, el lugar ha sido una de las ciudades donde más han subido los precios del alquiler. Rodríguez ha defendido el derecho a la vivienda, pero con unos argumentos cuestionables. "Si los malagueños no tienen un lugar en el que vivir, ¿quién va a atender a esos turistas? ¿Dónde se van a alojar los camareros que después nos sirven un vino y un espeto? ¿Dónde estarán los hijos de quienes barren estas calles? ¿Dónde estarán y dónde tendrán que acudir a dormir cada noche quienes vigilan nuestras calles para darnos seguridad?".
"Se trata también de defender un modelo de ciudad, un modelo de vida y yo creo que el sector turístico es fundamental para nuestro país", ha valorado, pero "ha de hacerse compatible con el desarrollo de la vida y sin vivienda no hay vida", ha señalado la ministra, que ha participado este viernes en un encuentro SER Málaga sobre 'España: soluciones ante el problema de la vivienda'.
Durante su intervención, y cuestionada, ya que fue alcaldesa, sobre si prohibiría los pisos turísticos en ciudades como Málaga, ya que también pide que los alcaldes sean valientes, ha asegurado que los regidores "siempre son muy valientes y hay que ser valiente para estar en la política municipal".
"He hecho esa petición a los alcaldes y alcaldesas de España, desde mi planteamiento como ministra de Vivienda, que me debo sobre todo a garantizar el acceso de la vivienda a todos los españoles y a todas las españolas en condiciones asequibles", ha señalado.