Casi la mitad de las muertes registradas en las cárceles de España entre 2017 y 2021 se deben a causas no naturales. En muchas ocasiones, por sobredosis: hasta 167 casos en los últimos cinco años. En este sentido, sobresalen las cárceles de las provincias de Cádiz y Sevilla.
El consumo de drogas es la segunda causa de muerte no natural entre los presos de todo el país —la primera es el suicidio—. Y es que los fallecimientos por sobredosis suponen el 43% del total de las muertes por causas no naturales en prisión, según los informes de mortalidad de Instituciones Penitenciarias (IIPP), de los que se hace eco el diario Público.
Instituciones Penitenciarias recoge que el consumo de drogas es "uno de los factores desestabilizadores más importantes entre las personas privadas de libertad". Pero los programas impulsados por instituciones públicas y entidades privadas para reducir los índices de drogodependencia son insuficientes. Especialmente sangrantes son los casos en las cárceles cercanas a la costa, como son Cádiz o Pontevedra, pero también Sevilla.
Muy cerca de estas prisiones desembarcan importantes cantidades de hachís, cocaína o heroína, por lo que en ellas hay presos que forman parte de las redes de narcotráfico, lo que explica, en parte, estos datos. Más del 70% de las personas presas en España lo están, directa o indirectamente, a consecuencia de una adicción, según reseña el informe Drogodependencias y Prisión: Situación de las cárceles españolas del Plan Nacional sobre Drogas (PNSD).
Casi el 40% (38,98%) de los encarcelados en la provincia de Cádiz durante 2022 está preso por delito de tráfico de drogas. En Sevilla, fueron el 14,79%, y en Pontevedra, el 30,91%. Así, no es extraño comprobar que en Sevilla I murieron 14 presos por sobredosis entre 2017 y 2021, en Botafuegos (Algeciras), fueron once, y diez en la prisión pontevedresa de A Lama.
La de Sevilla I es la cifra de todos los centros penitenciarios del país. A esas 14 personas hay que sumar las cuatro registradas en Sevilla II —en Morón de la Frontera—. Botafuegos, en Algeciras, registra once muertes en cinco años, o lo que es lo mismo, nueve reclusos de cada 1.000. En Puerto III son diez los presos muertos por sobredosis, sumando 25 casos en toda la provincia, la cifra más alta de España.
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