Un hombre de 49 años ha sido detenido por la Guardia Civil en Valladolid por un supuesto delito de conducción temeraria, conducir bajo los síntomas de alcohol y drogas y atentado a agentes de la autoridad. El conductor, además, se negó a someterse a las pruebas de detección de sustancias ilegales y alcohol.
Los hechos ocurrieron el 19 de febrero cuando una patrulla de la ARS de la Guardia Civil de León, que prestaba sus servicios en la provincia de Valladolid, detectó en la autovía A-62, sobre el km 126, sentido Burgos, un turismo circulando dando bandazos. El vehículo iba sin rueda delantera derecha y sin neumático trasero derecho. Además, circulaba chocando de forma repetida con la valla metálica de protección lateral y creando un grave riesgo a su persona, así como al resto de usuarios de la vía.
Con el apoyo de varias patrullas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Valladolid, los agentes lograron interceptar el vehículo y lo escoltaron hasta lograr detenerlo. Una vez detenido el vehículo, los guardias civiles procedieron a identificar al conductor del mismo, encontrándolo inmóvil y con unas gafas de sol puestas.
Al no poder abrir la puerta, y ante la posibilidad de que el conductor hubiera sufrido algún problema de salud, los agentes rompieron el cristal de la ventanilla, momento en el que el conductor reaccionó de forma hostil, negándose a salir del vehículo y agrediendo a uno de los guardias civiles con patadas y puñetazos. Por esta razón se procedió a su reducción y detención.
Ante los indicios de que pudiera encontrarse bajo la influencia de alcohol, drogas o estupefacientes, y negándose a realizar las pruebas de detección legalmente establecidas, se trasladó a dependencias policiales. Durante el traslado, ocasionó daños al vehículo oficial, así como autolesiones, por lo que se solicitó la presencia de personal sanitario para administrarle el tratamiento adecuado, siendo trasladado al Hospital Río Carrión de la localidad de Palencia.
Comentarios