Hace cuatro días que comenzó el paro de los camioneros que, convocados por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, llevan desde la madrugada del lunes sin conducir sus vehículos para pedir mejores condiciones laborales.
En diversos puntos de la provincia de Cádiz, los camioneros pasan las horas apostados, organizados en piquetes, para impedir en la medida de lo posible el transporte por carretera. Este jueves ha habido barricadas y quemas de neumáticas en la AP-4, y atascos en zonas logísticas de Jerez, Los Barrios o San Roque, aunque de momento no hay detenidos, “porque en los altercados de pinchar ruedas a algún camión o cortarle algún latiguillo, cuando avisan ya no está el piquete, es el camionero el que se ha encontrado el camión así”, explica José Pacheco, subdelegado del Gobierno en Cádiz.
Los efectos del paro indefinido ya se están notando y, aunque no se puede hablar de desabastecimiento, hay productos perecederos que es difícil encontrar en plazas de abastos y pequeños comercios, porque no llegan a las plataformas logísticas. En Mercajerez, por ejemplo, sigue habiendo patatas, cebollas o ajos, pero empiezan a faltar productos perecederos como los tomates, las lechugas iceberg, las habas, los tapines o las alcachofas. “Hay cierta escasez”, confiesa Ángel Salazar, director gerente de Mercajerez en declaraciones a lavozdelsur.es.
De momento, la situación no es preocupante. Las frutas y hortalizas procedentes de lugares como Murcia, Alicante, Granada o Lleida están teniendo dificultades para llegar a la plataforma jerezana. En Mercajerez aún quedan existencias de productos de zonas costeras, “pero para un día o dos como mucho”, reseña Salazar. Normalmente entran unos 200.000 kilos de alimentos diarios en Mercajerez, aunque este jueves han sido apenas 27.000 kilos.
Ángel Salazar, director gerente de la plataforma logística jerezana, cree que “se notará” la falta de alimentos conforme pasen los días, aunque el abastecimiento “dependerá también de otros canales”, ya que “hay grandes cadenas de supermercados que tienen sus propias centrales de distribución”. Mercajerez se centra más en el pequeño comercio, hosteleros, plazas de abastos… a los que empezará a faltarles género.
En otras plataformas logísticas andaluzas, como Mercasevilla, ha caído un 6% la entrada de mercancía en una semana. Por su parte, la entrada de género en el mercado central de abastos de Sevilla cayó un 86%. Hay escasez de pescado en provincias como Córdoba o Sevilla, aunque desde la Federación Nacional de Asociaciones Provinciales de Empresarios Detallistas de Pescados y Productos Congelados (Fedepesca) llaman a la “tranquilidad”, porque “se va a hacer el esfuerzo por estar siempre abastecidos”. En Mercagranada, por su parte, “falta de todo”, porque no han entrado camiones con suministros.
“Desde hace unos meses, la población lleva experimentando una subida tanto en los productos básicos como en su factura de la luz o gas, por no hablar de los precios de los carburantes. Nos enfrentamos a un escenario de empobrecimiento y reducción del poder adquisitivo de los hogares españoles no visto desde los años 80. Desde Fedepesca, ante esta situación y debido al riesgo que existe de que este empobrecimiento derive en una mala alimentación, se reclama a las autoridades la bajada del IVA al tipo superreducido (4%) para el pescado, producto esencial en una dieta equilibrada", señalan desde Fedepesca.
El alto precio de los combustibles y otra serie de reivindicaciones, como la prohibición de contratar portes por debajo del coste de explotación o que los camioneros no se encarguen de la carga y descarga como hasta ahora, mantiene en paro indefinido a los transportistas convocados por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, que para la portavoz del Gobierno central, Isabel Rodríguez, representa a una parte “minoritaria” del colectivo, y está impulsada por “posicionamientos de la ultraderecha”.
Para la ministra, esta “acción minoritaria de transportistas” supone un boicot “al resto de trabajadores y al sector que en este momento tan complicado trabajan para garantizarnos los alimentos y productos de primera necesidad”, según ha dicho en un encuentro con Juan Espadas, secretario general del PSOE andaluz.“Lo que estamos viendo son actos violentos que están generando que en algunos casos podamos quedarnos desabastecidos de alimentos o mercancías importantes para el sector primario", ha añadido.
La Junta apoya a los camioneros en huelga
El consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, considera que es “urgente” que el Gobierno central tome medidas —desde el 29 de marzo está prevista una rebaja de impuestos para aligerar el coste de los carburantes—, y le recuerda que las comunidades autónomas han reclamado un IVA superreducido del 4 % para los combustibles.
Para Bendodo, el Gobierno central mira "hacia otro lado y dice que el día 29 tomará las decisiones, y ese día es muy tarde ya”. "Hay que hacer ya que el Gobierno central tome la decisión urgente de meter mano a la bajada de los combustibles, luz y gas”, enfatiza.
El vicepresidente andaluz, Juan Marín, pide también una "decisión rápida del Gobierno de España para que se baje el IVA de los carburantes y que no se espere hasta el 29 de marzo, sino que hay que hacerlo ya". "Es absurdo someter a esta presión económica a todo nuestro sistema productivo", agrega.
Organizaciones agrarias piden “ayuda y comprensión” a los camioneros
“Comprendemos y compartimos los problemas del sector, porque literalmente vivimos los mismos”, señala Ricardo Serra, presidente de Asaja Andalucía, en declaraciones a Europa Press, pero pide a los transportistas “ayuda y comprensión”.
“Les pedimos un poco de ayuda y de comprensión, que no es sobre nuestra cabeza sobre la que tienen que caer los golpes”, incide el presidente andaluz de Asaja, quien explica que el paro de los transportistas afecta sobre todo a “frutas perecederas, que si no sale hoy o mañana ya no sale, y bastantes dificultades tiene el sector”.
COAG dice que el sector agroalimentario “es incapaz de aguantar un varapalo más en plena crisis”, y ruega al Gobierno que “dé soluciones a este conflicto de manera urgente”, en palabras de su secretario general en Andalucía, Miguel López, a juicio de quien “la huelga de los transportistas está provocando el caos y graves pérdidas para el sector agrario andaluz”.
La organización agraria habla de caos: “Hay miles de toneladas de alimentos que se están perdiendo, animales hambrientos a los que no les llega el pienso, por supuesto ruina absoluta para los agricultores y ganaderos y, no lo olvidemos, desabastecimiento para la población. Esto no es que sea urgente, es lo siguiente. No puede pasar de hoy”.