No todos los niños esperan la vuelta al cole con la misma ilusión. Para algunos, regresar a las aulas supone una pesadilla. Solo es 1 de septiembre y ya se ha vuelto viral el primer vídeo que retrata el bullying en su mayor esplendor. Marcos, un joven de Mallorca, cuenta los agrios momentos por los que tuvo que pasar su hermano cuando quiso celebrar su cumpleaños con sus compañeros.
“Hoy mi hermano cumple 11 años. Ayer, emocionado, fue a comprar una tarta para celebrarlo en el colegio. Y la grata sorpresa ha sido cuando sus compañeros, en vez de cantarle cumpleaños feliz lo que han hecho ha sido empezar a cantarle llamándole ‘gordo’, ‘foca’ y más malos nombres los cuales no son agradables para un niño de su edad”, ha comentado el joven por Instagram a modo denuncia.
“Mi hermano llorando y super triste ha cogido y se ha sentado solo en el patio. Momentos después, se aproximó otra vez el grupo de maleducados para hacerle lo mismo que habían hecho antes. Le decían: ‘Feliz cumpleaños gordo de mierda’ y muchos más comentarios.
Cuando el niño ha llegado a su casa, se lo ha contado todo a su familia: “El niño ha llegado a su casa y lo primero que ha hecho es echarse a llorar. Dice que esta vida es una mierda y que no quiere vivir más. No es la primera vez que se lo hacen, él lleva cuatro años en ese colegio, aguantando insultos, peleas y escupitajos”.
Marcos denuncia que ninguno de los adultos ayuda cuando ocurren estos episodios de violencia verbal. “Los profesores, que son los que más tendrían que hace hincapié, hacen la vista gorda y no ven nada”. Junto a este texto, Marco ha adjuntado un vídeo que han grabado los propios compañeros con intención de difundirlo y reírse de él. En las imágenes, el joven llora desconsolado ante los insultos de todos los niños.
El colegio es Puig de Lloseta, tras reunirse con la conselleria de Educación, se está planteando denunciar a Marcos por difundir el vídeo. Un portavoz del centro ha recordado que el vídeo publicado en redes sociales fue grabado en una actividad de verano cuya responsabilidad es del Ayuntamiento, por lo que la dirección del centro ha negado cualquier responsabilidad en el asunto