La muerte de Charo Cano, una de las propietarias del mítico bar Santa Marta, ubicado en la plaza de San Andrés, ha dejado un hondo pesar en Sevilla entre los clientes, amistades y el mundo de la hostelería de la capital hispalense.
La hostelera ha fallecido a los 65 años de edad. Toda una vida ha estado unida a un negocio que abrió en el año 1975. Con 18 años comenzó como camarera de un bar que empezó a estar gestionado por su madre y sus dos hermanos.
Casi 50 años después, Charo seguía al pie del cañón del negocio junto a su hermano Rafael.
José Luis Sanz, alcalde de Sevilla, ha mostrado su pesar por el fallecimiento de una mujer muy querida en la ciudad. "Mi abrazo a toda la familia del bar Santa Marta, así como a todos los parroquianos de este clásico establecimiento de nuestra ciudad".