De lo más dura es la historia de Justo Márquez, un hombre de 60 años enfermo de cáncer que ha pedido ingresar voluntariamente en el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre (Málaga).
"Quiero entrar en la cárcel sin hacer ningún tipo de delito. Quiero me dejen voluntario para al menos tener compañeros de noche y de día", ha manifestado este granadino.
Justo tiene miedo a "estar solo" y se siente "desahuciado" por los servicios sociales y sanitarios. Afirma no encontrar ayuda por ninguna parte y se siente “desesperado” ante la situación que atraviesa.
Además del cáncer que sufre, Justo también tiene problemas de ansiedad, depresión y corazón. "He pedido ayuda, pero lo único que me dicen es que visite a mi médico de cabecera".
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