Tras la autorización por parte del Juzgado de Instrucción número 9 de Valencia, algunos vecinos del edificio incendiado en el barrio de Campanar (Valencia), en el que perdieron la vida diez personas, han podido regresar al edificio para intentar rescatar algunos enseres que no se hayan visto afectadas por el fuego. También han podido retirar los vehículos que tenían estacionados en el aparcamiento del residencial.
Según ha detallado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), el magistrado ha tomado la decisión de que se pueda entrar a las viviendas después de que la Policía Nacional haya comunicado que esta medida no afecta a la investigación sobre el siniestro. Una autorización que excluye expresamente al piso 86, en el que se centran las pesquisas, del bloque de 14 plantas donde se originaron las llamas.
Los vecinos que han acudido iban indicando a los bomberos, que han sido los encargados de acceder a las viviendas, la distribución de las mismas y de las pertenencias familiares.
Uno de los vecinos, Othimani Boudaud, ha explicado que los bomberos han podido acceder varias veces a su casa, en la quinta planta. Este ciudadano ha pasado buena parte de la mañana la zona y ha podido recuperar varias bolsas con efectos personales, aunque ha explicado que los bomberos le han trasladado que la vivienda estaba "completamente afectada".
Como curiosidad, entre las bolsas con objetos personales y cajas fuertes que han ido sacando los bomberos, una de las familias ha recuperado una caja intacta del juguete de Lego de un parque de bomberos.