La adicción a la cocaína y el consumo de alcohol son señaladas como las principales sustancias de consumo por la población sevillana que se somete a tratamiento por adicción en los centros de Proyecto Hombre que operan la provincia. Ambas sustancias se posicionan por delante de otras como el policonsumo y el cannabis, como ha quedado reflejado en los datos ofrecidos por el Informe 2018 del Observatorio Proyecto Hombre sobre el perfil de personas con problemas de adicciones en tratamiento.
En la presentación de los datos obtenidos con el informe, el pasado miércoles en la Fundación Valentín de Madariaga, la directora general de Proyecto Hombre-Sevilla, María Ángeles Fernández, ha querido incidir en que "el 61,7% de los sevillanos que han acudido a esta institución para rehabilitarse lo ha hecho por su dependencia de la cocaína, un porcentaje que casi duplica la media estatal, fijada en el 34,9%". Partiendo de la cifra que apunta que en la comunidad andaluza y en particular en Sevilla el consumo de este tipo de drogas es mucho más elevada que en el resto de España. Fernández ha añadido, como contrapunto positivo, que en esta comunidad autónoma cuenta con más recursos de atención que otras autonomías, lo que facilita que los adictos a dicha sustancia acudan antes a tratamiento.
La segunda sustancia más consumida por los sevillanos es el alcohol, casi el 90% de la población atendida por cualquier sustancia manifiestan consumos regulares y/o problemáticos del mismo. Por ello, el informe lo cataloga como el mayor problema de salud pública en el ámbito de las adicciones en España. El director general de Proyecto Hombre-Sevilla, Francisco Herrera del Pueyo, achaca esta problemática a la normalización de consumo que se ha generalizado en toda la sociedad actual.
Además, y siguiendo con los datos obtenidos por el consumo de alcohol, cada vez se detecta a edades más tempranas (se estima en los 15-16 años). También presenta demandas de tratamiendo a edades más avanzas, fijada a partir de los 40 años, esto apunta a un mayor tiempo de consumo (29,6 años) sin estar sometido a tratamiento.
En total, 832 personas fueron atendidas por Proyecto Hombre en el año 2018 a través de sus diversos programas, con una asistencia diaria media de 352. En cuanto al perfil de la persona con adicción, el informe revela una mayoría de sexo masculino (88% son hombres y 12% mujeres) y una media de edad de 38 años (el 53,6 % tienen entre 29 y 39 años). La edad de inicio del consumo de cocaína se sitúa en los 20 años y el periodo de latencia desde que comienza el consumo problemático hasta que comienzan el tratamiento es de 16 años.
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