Juan Carlos Pacheco lleva unos años trabajando en el Aeropuerto de Jerez. Concretamente, como electricista de baja tensión. Es uno de los dos profesionales dedicados a este fin en el aeródromo jerezano, un servicio que está externalizado, y que cambia de empresa cada vez que cumple el plazo de la adjudicación.
AENA, a mediados de 2020, adjudicó el mantenimiento técnico de varios aeropuertos —Málaga, Sevilla, Almería, Granada-Jaén y Jerez de la Frontera— a Ingemont Tecnología S.A., un contrato cercano a los 3,3 millones de euros. Ahora sus trabajadores denuncian que no están cobrando.
Juan Carlos es uno de ellos. En Jerez solo hay dos electricistas, pero en todo el país son cientos de empleados los afectados por los impagos. De momento, la nómina de abril y la subida del IPC, que se revisa anualmente. "Nos hacen una regularización todos los años y nos la aplicaron en marzo, pero aún nos deben los atrasos del año pasado, y enero y febrero, que no la aplicaron", explica Pacheco, en conversación con lavozdelsur.es.
"Hasta ahora han sido puntuales con los pagos", admite Juan Carlos, que como el resto de trabajadores que siguen sin cobrar, está harto de "excusas" de la empresa. Primero fue que había salido ardiendo su centro de procesamiento de datos. Luego derivaron a los empleados al jefe de zona. Y después les dijeron que llamaran a Recursos Humanos, o que mandaran un email, que nadie contesta.
"Nos sentimos utilizados", señala Juan Carlos Pacheco, ya que, según relata, Ingemont comunicó a AENA su intención de dejar de prestar el servicio, pero por contrato debía continuar al menos seis meses una vez cumplido este trámite, es decir, hasta septiembre. En "rebeldía", dice el electricista, ha dejado de pagar las nóminas. "Nos sentimos utilizados", dice, ya que se encuentran en mitad de un conflicto en el que no tienen voz ni voto.
El 31 de marzo terminaron los dos primeros años de contrato, tras lo que Ingemont quería desprenderse del servicio, "pero la empresa, tras notificarlo, debe estar medio año. Y en medio estamos los trabajadores", se queja Pacheco. "He llegado a mandar dos o tres correos diarios y no tengo respuesta", insiste.
Ingemont Tecnología S.A., una compañía sevillana nacida en 2009 que empezó como una pequeña empresa de servicios para la industria, anunciaba en su propia web la adjudicación del contrato de mantenimiento técnico de varios aeropuertos. "Esta adjudicación nos refuerza en las zonas geográficas en las que ya estamos presentes, pero muy especialmente en Málaga, y significa un avance importantísimo en cuanto a carga de trabajo a largo plazo", incidía.
El contrato adjudicado entonces incluye las instalaciones de alta y baja tensión, servicios de alimentación ininterrumpida y grupos electrógenos para servicios esenciales. "Ingemont ha realizado un esfuerzo ímprobo en mantener estas instalaciones para un cliente de referencia como AENA, y ha incrementado su plantilla de forma notable para atender estos servicios", señalaba la empresa.
Mientras, pasan los días y trabajadores como Juan Carlos y el resto de empleados de la compañía siguen sin cobrar. "Han tenido un error y hasta me ha llegado la nómina en pdf, que la suelen mandar unos días después del pago. O sea, que no pagan porque no quieren", insiste.
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