Una indemnización de 150.000 euros. Esto es lo que pide la acusación particular de la joven de 21 años que denunció a Dani Alves de agresión sexual. Además, solicita una condena de 12 años de prisión para el futbolista.
En principio, la demandante no iba a solicitar compensación económica, pero su defensa ha pedido la referida cantidad por "las secuelas físicas y psicológicas sufridas".
Los síntomas que ha sufrido la joven, como argumenta la acusación, son compatibles con "un trastorno de estrés postraumático de intensidad globalmente elevada".
A 150.000 euros también asciende lo solicitado por la Fiscalía como indemnización para la joven. La acusación de la víctima pide además que Alves no pueda acercarse a ella a menos de 1.000 metros y no pueda mantener ninguna comunicación con ella por un periodo superior en diez años a la pena de cárcel que se le imponga. También se exige que el brasileño tenga una medida de seguridad de libertad vigilada durante ese tiempo.