La familia del pequeño Ángel, el menor de 11 años cuyos restos fueron encontrados, como los de su primo, en un vertedero de Toledo, no cree que su muerte fuese accidental. En este sentido, los familiares entienden que el cuerpo del menor fue desmembrado antes de que alguien lo depositase en la planta de reciclaje.
Ángel Benedicto, secretario de la Sociedad Gitana Española, así lo ha manifestado. "Se deduce que alguien lo metió desmembrado en un contenedor".
Si bien el cadáver de Fernando, el primo de Ángel de 17 años, apareció "de una sola pieza" en una cintra transportadora, los restos de Ángel fueron hallados en una zona donde los camiones depositan la basura. La familia entiende que su cuerpo no pasó por ninguna trituradora.
"Nadie se cree la hipótesis de una muerte accidental que barajan los investigadores de la Policía Nacional", ha manifestado Benedicto. La familia está a la espera de que se levante el secreto de sumario para conocer toda la verdad sobre las muertes de los dos menores.