Lauren López, conocido artísticamente como Desh, restauraba hace unos meses el grafiti mítico de Migue Benítez. Ahora ha vuelto a demostrar su arte por una causa muy diferente: su solidaridad con el pueblo valenciano. "Todo empezó el fin de semana después de las inundaciones en Valencia. En ese momento me sentí valenciano y lo pasé verdaderamente mal y lo sigo pasando muy mal porque ha sido una catástrofe la que ha pasado allí. Y yo sentí en ese momento la necesidad de que mi empatía quedara representada de manera gráfica en algún sitio donde se pudiera ver, donde la gente que pasara por Jerez lo viera. Y entonces me decidí a pedir un muro libre".
El sitio elegido está junto al Parque de Bomberos de Jerez y el grafitero ha querido bucear en la historia para poner su sello: "Empecé a darle vueltas, a ver de qué forma podía representarlo. Vi que el origen etimológico de Valencia era Valentia, por una especie de legado que le hacen los romanos a la gente que luchó en las guerras íberas. Lo más original es que quede de alguna forma reflejado lo que más representa a la gente que te lleva a la calle ese día a ayudar sin pensar en nada, simplemente en la persona que está al lado que lo está pasando mal. Y yo creo que ahí está. Representa un poco una de las partes más buenas que tiene el ser humano, que es la solidaridad".
Lauren López lamenta no haber podido desplazarse a tierras valencinas como han hecho otros jerezanos para echar una mano, pero no quería quedarse con las ganas de rendir su tributo: "Yo también quería mancharme las manos. Por circunstancias no me he podido ir a Valencia y he pensado en pintar la calle. Yo en la calle pinto ya poco, pero me nació un poco ese león, ese sentimiento que te sale en ocasiones muy particulares. Y esta yo creo que la merecía. Cada uno lo ha exteriorizado de la manera que ha podido. En este caso, yo me considero artista. Somos los chamanes de la tribu, somos la diana y nos moriremos siéndolo. Probablemente nos moriremos pobres, pero sabemos que tenemos que ser el punto guía de la gente. Yo he querido poner un poco a mí aquí el granito de arena con mi que estoy aquí acompañado con mi colega Juan Diego Barba, que también me ha echado una manita desde el principio".
"El dolor en la barriga me nació a mí, pero esto es de varias personas: Juan Diego Barba, Alejandra Angulo, José Luis Lozano y Fernando Toro, que han estado aquí dando la talla. Es un rollo muy conceptual, porque con lo que está pintado es con arcilla. Aquí nos hemos manchado las manos simbólicamente con la misma arcilla con la que se han manchado las manos allí, solo que la he tratado con unos aglutinantes para que se mantenga durante un tiempo, pero que se biodegrade. O sea, que con el tiempo llore de la misma forma que ha llorado la gente. Es poco guiño a su lengua y a su nombre original", explica el artista jerezano.