Cada vez son más las voces críticas con las condiciones en las que trabajan muchos caballos que tiran de carruajes turísticos en ciudades andaluzas. Esta misma semana, el equipo provincial del Partido Animalista Pacma en Málaga ha interpuesto una denuncia ante el Seprona tras interceptar la presencia de un caballo con aparentes síntomas de enfermedad, siendo obligado a transportar turistas en una calesa en la localidad de Fuengirola. El animal, que había sido visto días antes en condiciones similares, salivaba constantemente, tenía la lengua por fuera y los ojos entrecerrados.
Los hechos suceden después de que el pasado 19 de agosto un caballo se desplomase durante el servicio en una céntrica calle de Málaga y apenas diez días antes de la jornada Fuengirola a Caballo, en la que se prevén espectáculos ecuestres; exhibiciones de enganches; concurso de vestimenta y atalaje; paseo de jinetes, amazonas y carruajes.
Desde Pacma advierten de que estas situaciones son frecuentes y que se seguirán repitiendo mientras se permita el uso de tracción animal en lugar de la sustitución progresiva por vehículos eléctricos.
A raíz de esto, la organización inició a comienzos del verano una campaña para eliminar en toda Andalucía el uso de equinos en las calesas: Coches de Caballos Eléctricos Ya, proponiendo que cocheros y ayuntamientos trabajasen en la inserción de motores eléctricos en los mismos carruajes para mantener los puestos de trabajo y el encanto de los paseos sin explotar a los animales.
En Jerez, el coordinador provincial de la formación política animalista, Marcelino Laínez, se ha reunido en las últimas horas para trasladar la misma propuesta a los concejales delegados del Ayuntamiento jerezano, "siendo esta bien recibida y con disposición a estudiarse", según aseguran desde la organización política animalista.
El responsable político de Bienestar Animal, Rubén Pérez —también delegado de Fiestas y Seguridad—, no ha dejado de mostrar en todo el mandato su sensibilidad para estas cuestiones y no es descabellado pensar que, a medio plazo, Jerez, ciudad del caballo, pudiera ser de las primeras ciudades en combatir lo que en muchas ocasiones es un claro maltrato a los equinos.
Pacma muestra su apoyo para todos aquellos consistorios que quieran poner en marcha la iniciativa que, a priori, parecer tener el apoyo de una parte importante de la ciudadanía, "según el feedback recogido en las redes sociales", advierten.
Muchas ordenanzas municipales remarcan que está prohibida la circulación con animales enfermos, pero estas situaciones son, desgraciadamente, más frecuentes de lo que se piensa.