Los colectivos memorialistas de Andalucía, reunidos este pasado sábado en la sevillana Plaza de la Gavidia, han decidido organizar una marcha en el mes de octubre al Cortijo de Gambogaz, el ‘Pazo de Meirás’ andaluz que el Ayuntamiento de Sevilla le regaló al criminal Queipo de Llano en 1937 como regalo por ordenar la matanza de 50.000 andaluces tras el golpe de Estado fascista contra la democracia española.
Así han informado a este periódico fuentes de las entidades memorialistas, quienes afirman que van a empezar a trabajar para que las “incautaciones económicas” de los golpistas sean devueltas a la ciudadanía y/o a sus legítimos dueños, con el objetivo de que en ningún caso en manos están en manos de los herederos de los golpistas que implantaron en España una dictadura de 40 años y convirtieron a nuestro país en el segundo del mundo con más desaparecidos.
“Todos los generales golpistas entraron en el franquismo con una mano atrás y otra delante, incluido Franco, y salieron millonarios”, denuncia Juan Morillo, miembro del movimiento memorialista andaluz. Igualmente, las entidades de la memoria democrática emprenderán a partir de septiembre una campaña para pedirle a la Junta de Andalucía que honre con el nombramiento de Hijos Predilectos, el máximo galardón de la administración autonómica, a las víctimas del franquismo y la represión.
La marcha al Cortijo de Gambogaz, finca de unas 600 hectáreas situada en el municipio sevillano de Camas, a 5 minutos de los aparcamientos de la Expo 92, tendrá lugar en octubre y el movimiento memorialista quiere que sea el pistoletazo de salida para empezar a reclamar los bienes materiales incautados por el régimen dictatorial que en la actualidad están en manos de sus herederos.
El Cortijo de Gambogaz, que en el momento de la expropiación era propiedad de Ignacio Vázquez, es una explotación agraria, situada en la Vega del Guadalquivir, una de las zonas agrícolas más ricas y fértiles de Andalucía. En la actualidad se sigue explotando y sus cuantiosos beneficios van a parar a los herederos del criminal Queipo de Llano.