Dos propuestas casi calcadas, dos propuestas que tienen que salir adelante en sendos plenos, y dos propuestas que podrán cortar de raíz la influencia de las casas de juego en el día a día de las ciudades de Cádiz y de Jerez. El Ayuntamiento jerezano es el último en sumarse a una iniciativa que meses atrás adelantó la concejala de Ganar Cádiz Eva Tubío, la de limitar el número de casas de juego y alejarlas de los centros escolares.
El Ayuntamiento de Jerez, igualmente, cerrará aquellas que se encuentren en entornos académicos, para tratar de frenar la influencia de estas sobre menores de edad, que en cualquier caso tienen, en teoría, el acceso restringido a estos establecimientos.
El aumento del número de personas que sufren de ludopatía ha venido de la mano de dos realidades: la facilidad para cualquier ciudadano, de cualquier edad, de apostar a través de internet; y la presencia de espacios dedicados exclusivamente para el juego en los centros y barrios de las ciudades. Según cifras de la Junta, el número de casas de apuesta ya llega casi a las 90.
En paralelo a esta lucha municipal contra el juego, la reciente presencia del líder de IU Alberto Garzón en el Consejo de Ministros, irá enfocada a materias de Consumo, pero dentro de ellas se encuentra la regulación del sector del juego. El político comunista malagueño y profesor universitario se ha mostrado en diversos foros muy contrario al mundo del juego, en tanto afecta en los últimos tiempos a jóvenes de origen más humilde que otros tipos de perfiles anteriores.
El enganche de estas casas de juego suele ser el ofrecer un espacio para presenciar eventos deportivos gratuitamente, ofreciendo bebidas como refrescos o cerveza muy por debajo del precio general, si no invitando directamente a los grupos que acuden a ver los partidos si realizan apuestas.
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