La rápida actuación de la Guardia Civil el pasado fin de semana evitó que un niño de tres años sufriese un golpe de calor tras quedarse encerrado en el interior de un coche en Chiclana (Cádiz).
El pequeño se había escapado de una vivienda situada en una finca sin que sus padres, que estaban realizando tareas domésticas, se diesen cuenta.
El menor acabó metiéndose en un vehículo que estaba cerca y en el que quedó atrapado. Como ha informado la Guardia Civil, el pequeño pulsó el botón de emergencia que tenía el BMW, conectando de manera automática con Emergencias 112, que dio la señal de alerta a la Benemérita.
Agentes que acudieron hasta el lugar del suceso accedieron a la finca, tras ver desde fuera el coche, y rescataron al menor, que presentaba signos de deshidratación e insolación.
Los padres no se enteraron de nada hasta que fueron avisados por la Guardia Civil. No han sido detenidos ni se ha abierto ninguna investigación, ya que se ha entendido que todo producto de un despiste.