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El bar Yellow de Jerez ha vuelto a abrir. Ya no está Antonio Rivera al frente de este establecimiento, ubicado en la calle Maestro Fernández Sierra del barrio de Vallesequillo, Ahora es una familia de Arcos de la Frontera la que comanda un bar que cuenta con 42 años de historia. En la cocina está Inma y el equipo se completa con su hermano Fran y su sobrino Kilian.
A los pocos días de que se produjera el traspaso del negocio, ya abría de nuevo sus puertas. Se mantiene el mismo el nombre y "se respeta la esencia", según explica Inma, pero ahora con un sello diferente y un servicio "más extenso". El local se ha respetado en su distribución, aunque hay algunos cambios en la decoración y ahora hay dos pantallas de televisión donde los clientes podrán ver los partidos de fútbol.
A mediados de octubre abrió, a los pocos días del cierre con el anterior propietario. "Abrimos de martes a viernes desde las 8:00 a.m. para dar desayunos y el pan es de la Junta de los Ríos. Ponemos también chicharrones al corte, carne mechada y lo típico de untar también", dice Inma sobre los desayunos.
Los nuevos dueños señalan que la comida que se ofrece es casera, como albóndigas en salsa, carne en salsa, carrillada, ensaladilla, papas aliñadas, y de las hamburguesas destacan que también son caseras. "Los pinchitos los cortamos y los adobamos nosotros, las alitas de pollo también, que así que esto casi todo es casero. Tenemos también choco frito, cazón, gallo empanado... Cada día voy haciendo algo fuera de carta", señala la cocinera.
La hora de cierre no es fija. "Hay días que cerramos a la una, otros que cerramos las 12". Se sirven tapas, medias raciones y enteras. También hay cierta flexibilidad en la carta porque "hay personas que vienen al mediodía y me dicen que si les puedo hacer un plato combinado y se lo hago. Nos adaptamos a los clientes", dice Inma.
El Yellow de toda la vida destacaba por sus sándwiches y hamburguesas. El nuevo Yellow respeta esa marca de la casa y destacan que "está saliendo muchísimo el sándwich especial Yellow y la hamburguesa especial Yellow". La clientela es variada, aunque muchos son de la etapa anterior: "Muchas personas que vienen me dicen que cuando estaba Antonio también venían y algunos incluso venían con sus padres. Y luego también hay clientes que nunca habían estado aquí".
"Hemos querido mantener lo que es la esencia del Yellow. Sigue con el mismo nombre, el mismo color de pared, hemos pintado y ahora se pueden ver todos los partidos de fútbol, tanto de Primera como de Segunda. Por ahora está teniendo una buena aceptación. En los desayunos todo el mundo está quedando muy contento. Y por la tarde ponemos también la ofertita del café con pastelito. Es un bar de barrio al que se puede venir tanto a comer, a merendar, a desayunar y a cenar", señala Inma.