Extenuado por las altas temperaturas, un caballo se ha desplomado en la Feria de Málaga. El equino tiraba junto a varios más de un carruaje. A pesar de las recomendaciones de no circular a determinadas horas, para no exponer a los animales al asfixiante calor, hay cocheros que siguen respetar la salud de los animales.
El Ayuntamiento de Málaga dispuso en sus ordenanzas para su feria que "se debe garantizar que los caballos se encuentren en buenas condiciones higiénico-sanitarias, manteniéndolos en lugares o instalaciones adecuados, así como proporcionarles los cuidados y atención necesarios que exijan sus necesidades fisiológicas y etológicas, según especie y raza. Igualmente, se deben garantizar periodos suficientes de descanso, así como el suministro de alimentación y agua adecuadas a las necesidades del animal".
Desde Pacma han denunciado este nuevo desplome de un caballo "trabajando". "Los animales 'de producción' como este quedan fuera de la Ley de Protección Animal del Gobierno. Están condenados a la explotación de los cocheros", señalan desde el partido animalista.
Otro caballo se desploma "trabajando", esta vez en la feria de #Málaga.
— PACMA (@PartidoPACMA) August 18, 2022
Los animales "de producción" como este quedan fuera de la #LeydeProtecciónAnimalEstafa de @AnimalesGob, @ionebelarra y @sanchezcastejon. Condenados a la explotación de los cocheros.
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Las redes han mostrado su indignación por un nuevo caso de explotación y maltrato animal. "La mejor regulación es prohibirla por siempre. Esta barbarie se acaba cuando la sociedad actúe en bloque, exigiendo a sus gobernantes que paren esta matanza en cámara lenta y acudiendo en grupos a decirle a los turistas que no usen los carruajes. Sería un buen comienzo", apunta William Páez.
"Esto es una vergüenza y una salvajada", se queja un tuitero. Juan López destaca. "Es increíble que los españoles, autodenominada gente del primer mundo, maltraten animales, asesinen toros, asesinen perros de caza, maltraten de manera sanguinaria a toros en tradiciones retrógradas. Lo más terrorífico es que disfrutan de estas actividades y las llaman arte".
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