Ante el aumento de las temperaturas, la Dirección General de Consumo de la Consejería de Salud y Familias recuerda a la ciudadanía que a la hora de adquirir aparatos de refrigeración o aire acondicionado es recomendable, siempre que sea posible, optar por productos con clasificación energética 'A', ya que se trata de aparatos más eficientes, que permitirán reducir el consumo de energía y ahorrar en la factura eléctrica. Asimismo, es importante adquirir aparatos adecuados a las necesidades de cada hogar, según el tamaño de la estancia a enfriar, la orientación de la vivienda, el número de personas que la habitan, etc.
Por otra parte, es conveniente utilizar un termostato para regular la temperatura, teniendo en cuenta que durante el verano la temperatura adecuada para el confort es de 26 grados. Cada grado de menos implica que el aparato tenga que incrementar el consumo para alcanzar el nivel seleccionado, lo que puede suponer un aumento considerable en la factura eléctrica.
Por la misma razón, se deben ubicar los aparatos de refrigeración, tanto aires acondicionados como ventiladores, alejados de la luz directa del sol o de fuentes de calor como pueden ser hornos o vitrocerámicas que puedan afectar al aparato. También es importante realizar un correcto mantenimiento de los aparatos, con revisiones periódicas y una limpieza regular para evitar un incremento en el consumo energético.
Cuando estos aparatos estén en funcionamiento se deben cerrar las puertas y ventanas para evitar derrochar energía. Además, se deben apagar cuando no estén en uso, siendo recomendable desconectarlos antes de abandonar la estancia para aprovechar que la temperatura se mantendrá fresca durante un tiempo.
En todo caso, para intentar utilizar lo menos posible los aparatos de climatización en la temporada de verano se pueden adoptar medidas sencillas como la instalación de toldos, ventilar la vivienda en los momentos más frescos del día o cerrar las ventanas y persianas en las horas más calurosas para mantener la temperatura interior de la vivienda.
Ante cualquier duda o consulta en materia de consumo, la ciudadanía puede contactar con Consumo Responde, un servicio gratuito de información y asesoramiento a las personas consumidoras y usuarias, impulsado por la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía. Se trata de un servicio multicanal, al que se puede acceder de forma continuada a través del número de teléfono 900 21 50 80, de la página web www.consumoresponde.es, del correo electrónico consumoresponde@juntadeandalucia.es; y de los perfiles en las redes sociales Twitter (@consumoresponde) y Facebook (www.facebook.com/consumoresponde).
También se puede recibir asesoramiento en los Servicios Provinciales de Consumo de las delegaciones territoriales de Salud y Familias presentes en todas las capitales de provincia, así como en las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC), y en las organizaciones de personas consumidoras y usuarias.