Ola de calor. La Agencia Estatal de Meteorología ya ha avisado de la primera del verano. Se avecinan temperaturas extremas de hasta 41 grados y una alerta amarilla en toda la provincia de Cádiz que ya se está notando. Andalucía nota cómo los termómetros se disparan, circunstancia que no solo afecta a las personas sino también a los animales. Ante las previsiones, y como es habitual en la temporada estival, las protectoras se preparan para que a los peludos no les falte de nada.
En la protectora de animales San Antón de Jerez, unos 120 ejemplares, entre perros y gatos, conviven en un refugio habilitado en un espacio alquilado. Ellos también sufren las inclemencias del clima. “Intentamos que tengan agua siempre muy fresca y evitamos que estén en el patio en las horas de máximo calor”, explica Maripaz Calderón, presidenta de esta asociación que nació en 2011 y ha llegado a acoger hasta caballos. En la actualidad, un equipo de voluntarios cuida a perros y gatos con mucho esfuerzo. “Nos cuesta mucho sacar este refugio adelante”, confiesa.
La presidenta, también implicada en atender las necesidades de los animales, comenta que procuran que tengan sombra cerca. “Pasan el mediodía y las peores horas a la sombra, durmiendo en sus camitas y, por la tarde, vamos a bañarlos, a refrescarlos de nuevo, y les cambiamos el agua”, dice. Para ello, utilizan bañeras que a algunos agrada y a otros no tanto.
En ocasiones, durante estos meses, Maripaz se encuentra con casos de animales deshidratados. Según comparte con lavozdelsur.es, “sigo viendo a gente que los tiene en medio del campo, sin sombra ninguna, y no saben donde meterse. Medio Ambiente está pendiente, pero aun así sigue habiendo”.
Las temperaturas extremas pueden tener consecuencias graves en las especies como el estrés o los cambios de comportamiento. También pueden sufrir golpes de calor, deshidratación o problemas en la reproducción, incluso la muerte.
En el refugio Kimba de Chiclana, con una extensión de 6.000 metros cuadrados, unos 80 perros y gatos reciben esos cuidados que antes nadie les daba. Este terreno en mitad del campo existe desde 1966, pero la protectora que lo gestiona se fundó en 1872, siendo la más antigua de España y unas de las más vetustas de Europa.
En sus instalaciones, los perros viven en naves con parte cubierta para dormir, un patio y el campo, mientras que los felinos disponen de una gatera recién estrenada. “Pudimos invertir en ella después de muchos años ahorrando y ahora están de maravilla”, comenta Nieves Orellana, presidenta del refugio que ya tiene experiencia en combatir el calor.
“Nosotros ponemos piscinas pequeñitas repartidas por todo el campo para que ellos de puedan refrescar cuando están fuera de sus naves y, por supuesto, tenemos muchísimo cuidado de que no les falte agua nunca”, explica Nieves que hace hincapié en que, en estos meses, tienen especial cuidado con los perros mayores. “Al igual que con las personas mayores. Hay algunos que tienen patologías y les cuesta salir de sus naves, por eso tenemos que estar pendientes de sacarlos para refrescarlos”, comenta desde el refugio, donde procuran que todos estén hidratados, tanto personas como animales.
Durante el verano, no solo extreman las precauciones con respecto a las olas de calor sino también contra las garrapatas. Según explica la presidenta, estos parásitos, que se alimentan de la sangre y pueden transmitir enfermedades, proliferan hasta el otoño. “Igualmente, durante todo el año, hay pipetas para desparasitarlos”, dice.
Del cuidado de las especies se encarga un equipo de voluntarios y un veterinario. La mayoría de los perros y gatos que habitan en este refugio presentan alguna patología o han sufrido accidentes en las calles. “Estos no tienen a una persona detrás que pueda guiar al veterinario, es él quien tiene que ir descubriendo qué les pasa”, añade.
¿Más abandonos en vacaciones?
Según datos del Colegio Oficial de Veterinarios de Sevilla, las vísperas de las vacaciones de verano son la época en la que las cifras llegan a duplicarse. España es el país europeo con mayor tasa de abandono animal, con cerca de 300.000 animales que quedan desamparados al año.
Este año, el Colectivo Andaluz Contra el Maltrato Animal (Cacma) ha advertido que en Andalucía las cifras han vuelto a subir “en aproximadamente un 10% o un 15% más que en años anteriores", lo que da lugar a un mayor colapso de las protectoras a nivel general.
“En esta época se escuchan más porque hay gente que los deja porque se va de vacaciones. No tienen dos dedos de frente, hay sitios donde lo puedes dejar”, sostiene Maripaz Calderón. Ella insiste en que hay alternativas para no llegar al abandono como hoteles especializados, campings o residencias caninas.
“Un animal es un miembro de la familia más, igual que empleas dinero en tus vacaciones, hazlo en ellos”, dice Maripaz que añade que “en verano se tiende más al abandono porque estamos más libres, queremos viajar e ir a la playa. Hoy en día hay playas para perros y los gatos, si los dejas en casa con bastante agua y comida, y alguien que le eche un vistazo, no pasa nada. Pero claro, lo más fácil es abandonar”, lamenta.
Para Nieves, “es una leyenda” que en verano y después de Navidad incremente este tipo de maltrato animal, considerado un delito por la Ley de Bienestar Animal con multas de hasta 50.000 euros. “Por desgracia, hay abandonos durante todas las épocas del año”, dice la presidenta del refugio Kimba, que, tras 33 años de experiencia, no nota que haya más en unos meses que en otros.
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