En un mundo de fotos de instagram, alegrías, planes, eventos, festivales, viajes a la playa, noches de película y manta o simple broma entre amigos, entre familia, la realidad incómoda de la muerte no da likes. Nadie quiere verla. Ni compartirla. La enfermedad, la tristeza, no es de este tiempo, si es que lo fue de alguno.
Por eso, Pilar López ha iniciado una batalla, la visibilización, la comprensión, la empatía, sobre una problemática que existe, y que no queremos ver. Una reivindicación del dolor. Una ubicación, lo que sea, en Sevilla, para visibilizar el luto perinatal.
La muerte de un bebé en gestación se considera a cualquier momento entre la concepción y el nacimiento efectivo, que es el momento en que se rompe el cordón umbilical. Eso llegó para Pilar en la semana 38 de gestación. El día 9 de abril de 2022 y el 10 dio a luz con ella fallecida. Se llamaba Pilar también, como ella. Fue una mas de los 300 casos anuales que se dan en Andalucía.
"Es un tema tabú, doloroso, porque esperamos la muerte de una persona mayor, pero no de un bebé. Lo más fácil es callar y hacer que no ha pasado. Y si no ha pasado, no se habla. Y para la sociedad es más fácil. Pero claro, no para las familias", explica. De hecho, las familias afectadas "necesitamos hablarlo, nombrarlo. La sociedad nos intenta acallar. Porque mi hija ha existido".
Ese temor al luto es una mala relación de los vivos con la muerte. "Es falta de formación, de educación a nivel social". Eso implica muchas cosas. Un llanto inesperado. En cualquier lugar. A cualquier hora. "Mi marido y yo hemos tenido mucha suerte con nuestra familia y nuestro círculo cercano, que nos ha arropado en todo momento. Hemos hablado de ella, hemos tenido un duelo muy sano y han intentado ponerlo fácil. Pero la pérdida de un hijo es lo más horroroso que puedes vivir".
A cualquier hora. En cualquier circunstancia. Tomando un café. "Estamos en una cafetería y de estar riendo pasamos en un segundo a llorar. Y lo respetan. El problema es cuando tu círculo te dice cállate, olvídalo, aún eres joven, ya tendrás otra". Eso le hace rabiar. "No, yo podré tener 20 más, pero aquella fue mi niña, y fue la primera, y da igual si es la segunda o la tercera. Si necesitas llorar, lloras".
"Me encontraré con ella"
La vida para ella y su pareja ha sido dura. "Te cambia la vida, te quitan la inocencia. Aprendes a vivir, o a malvivir, a sobrevivir. Pero yo puedo ser feliz, aunque me acuerde a diario de ella". Ella, por ejemplo, sí ha tenido en el pensamiento la religión, la que a cada cual da explicaciones sobre qué ocurre tras la muerte. "Creo en Dios, pero no creo que me haya castigado. Lo que creo es que me encontraré con ella, y eso me consuela mucho. Además, es el ángel de la guarda de su hermana, que ha venido con problemas de salud. No le hago daño a nadie pensando eso, ¿no? Son mis creencias".
No tuvo tanta suerte con una sesión de psicología, la disciplina mundana para acometer duelos tan duros como éste. "Fui dos veces. De ambas salí diciendo que no volvía. Quizás, porque lo hicimos rápido, demasiado pronto. Pero en aquel momento lo hicimos así. Yo no estaba preparada para escuchar lo que me decía".
Lo importante de la visibilización que reclama Pilar López al Ayuntamiento de Sevilla, un espacio para recordar el duelo perinatal, está en mirar a la sociedad, a acabar con el tabú, pero también servir de apoyo a quienes pasen por esta mala lotería. "El mensaje que le mando a esas familias es que, por desgracia, digamos, sobrevivimos, y hay que sobrevivir como mejor se pueda. Ese dolor siempre estará, pero hay que transformarlo. Nosotros hemos conseguido convertir la rabia en amor. Se lo debemos a nuestros hijos, y los padres se lo deben a ellos mismos. El mundo sigue".
Hay muchas más preguntas. Por ejemplo, qué hace la Ley en estos casos. A ella le dieron permiso en el trabajo por ser madre en igualdad que el resto de madres. A su marido, no, aunque ya se va reconociendo, y justo está en trámites legales para reclamar las cantidades que no percibió por no trabajar esas 16 semanas. No bajo todas las circunstancias, por lo que legalmente puede facilitarse el asunto aún más.
Por el momento, Pilar ha conseguido 43.108 firmas para que Sevilla tenga un espacio de conmemoración del duelo perinatal. "Una historia que muchos padres en Sevilla, España o el mundo, por desgracia, pueden entender", dice en la web. Si está viviendo un caso como este, puede dirigirse en Andalucía a asociaciones como Matrioskas, Fedup o Alma y vida.