Llenar la mesa esta Navidad costará más que el año anterior. De hecho, en el mercado se esperan subidas de más del 30% en algunos alimentos. Este aumenro de los precios de los productos básicos es una consecuencia directa del alto coste de la luz, la subida de los combustibles o la crisis en el transporte. Por todo ello, los comerciantes se ven obligados también a subir los precios de sus productos.
Esto ha provocado que haya personas que adelanten sus compras por miedo al desabastecimiento. Como afirmaban muchos de los comerciantes del mercado de Abastos de Jerez, en el reportaje que realizó allí lavozdelsur.es el pasado mes, los consumidores tienen miedo, no solo de la subida de precios, que parece no tocar techo, sino también de no encontrar los productos que desean debido a la crisis de suministros.
Existen productos que han subido su precio a lo largo de todo el año, independientemente de la cercanía al mes de diciembre. Es el caso del aceite, que ha aumentado un 25,4%, los refrescos un 11,4%, la carne de ovino y caprino un 6%, la pasta un 6,5% o los huevos en hasta un 4,5%.
Sin embargo, entre los productos que más suben como consecuencia de la alta demanda en Navidad se encuentran los mariscos, el pescado y algunas carnes, como el cordero, el cochinillo, el capón o el pavo.
Adelantar las compas y congelar los alimentos hasta una de las noches más esperadas del año se ha convertido, para muchos, en una de las mejores opciones para poder hacer frente a las celebraciones navideñas.