Los carritos de los supermercados, los tradicionales, esos en los que echas una moneda para desbloquearlo, tienen las horas contadas en España. La revolución tecnológica tiene la culpa y un nuevo concepto de carro de la compra aterrizará próximamente en las grandes superficies españolas.
Aunque todavía no hay una fecha confirmada para implantar el novedoso sistema, sí se sabe que los nuevos carros funcionarán con un código QR y con la NFC. Para coger un carro habrá que acercar el teléfono móvil. El establecimiento en cuestión, como ocurre con los 50 céntimos o euro que se depositan actualmente, cobrará una pequeña cantidad que será devuelta una vez que el carro regrese a su lugar.
Esta nueva tecnología pretende ofrecer estrategias de fidelización y ofertas personalizadas al cliente. Cada producto que se introduzca dentro del carro quedará registrado, conociendo los gustos y artículos habituales de la compra de cada cliente. De esta manera, los supermercados tendrán un conocimiento detallado de lo que suele llevarse cada persona del establecimiento.
Con este sistema no habría que pasar los productos por línea de caja, por lo que muchos puestos de trabajo pueden estar en peligro. El carro va registrando los datos de los productos y ofreciendo detalle de la cuenta al instante al cliente, que al final de su compra podrá pagar a través del teléfono móvil.
En supermercados de países como Alemania, Japón o Suecia ya se ha puesto en marcha este método de compra que supone una revolución al cambiar el concepto tradicional.