Más de 100 trabajadores de Supersol podrán salvar sus puestos de trabajo tras las negociaciones efectuadas en los últimos días entre el comité de empresa y la dirección de esta cadena de supermercados. Según informa el comité Intercentros la cifra de despidos pasaría de 404 a 294, quedando además abiertos dos supermercados de la provincia que previsiblemente entraban en la lista de cierres por la situación económica desfavorable y de pérdidas que alega el grupo lituano que la dirige: el de la calle Real de San Fernando y el de la avenida del Perú de Cádiz ciudad. Asimismo, una serie de pescaderías, de las que se preveía su cierre a mediodía, también se mantendrían abiertas.
Es el fruto de las mesas de negociaciones entre la empresa y los sindicatos, que días atrás reducían en un principio en 88 personas el ERE inicial y que finalmente resultaría en 110 petsonas. Eso sí, con una condición indispensable: "siempre que haya acuerdo entre las partes". Sin embargo, todavía no hay un acuerdo definitivo y el próximo miércoles concluirán las negociaciones.
A la espera de las indemnizaciones
La empresa ofrece una indemnización por despido de 27 días por año y 16 mensualidades, mientras que los sindicatos UGT y CCOO reclaman 30 días y 22 mensualidades, y CGT 31 días y 2 mensualidades. Sin embargo, fuentes sindicales han asegurado a este medio que la intención es llegar a un acuerdo, ya que la legislación laboral estipula 20 días por año trabajado y doce mensualidades, una realidad a la que se aferra la cadena del grupo lituano para forzar un acuerdo inmediato.
De hecho, trabajadores de los supermercados Supersol en Jerez, la ciudad más afectada por la decisión de la empresa, han declarado a lavozdelsur.es no querer hablar sobre su situación laboral "a la espera de las indemnizaciones", ya que "tienen miedo" a que Supersol rompa unilateralmente el posible acuerdo y se vayan con las peores condiciones posibles. Es por ello que los trabajadores no quieren hablar pese a que con el preacuerdo vayan, de una forma u otra, 294 personas a la calle y más de 3.000 reestructuraciones de horarios, de las cuales no se conocen con exactitud sus consecuencias.
De la misma forma, la empresa ha ofrecido acogerse voluntariamente el ERE a los trabajadores que así lo deseen, con un plazo que acabó la noche de este sábado. Un acuerdo que, insiste, quedará totalmente sujeto a la firma de un acuerdo todavía inconcluso.