Las comunidades autónomas tienen hasta el 1 de octubre para aprobar una norma para establecer la regulación de los VTC ya que la normativa actual, un decreto del Gobierno de España, finaliza su vigencia. En Andalucía hay un auténtico conflicto después de que trascendiera que lo que quiere aprobar la Junta se ha negociado únicamente con las empresas de VTC y a espaldas de los taxistas.
El descontento del sector del taxi es evidente y así lo demuestran las manifestaciones celebradas en estas semanas. Al principio rechazaban cualquier negociación, aunque posteriormente se abrieron a sentarse en la mesa. Trabajadores del sector denunciaron ante lavozdelsur.es que ninguna de las propuestas hechas habían sido tenidas en cuenta por la Junta de Andalucía.
A pesar de esto, el discurso público del Gobierno que dirige Juanma Moreno ha insistido en que intentará llegar a un acuerdo hasta el último día pero, de momento, ese acuerdo no existe y el sector sigue mostrando su indignación. Desde Élite Taxi, una de las organizaciones manifestadas, denuncian que "no se puede hablar de diálogo cuando no hay transparencia, no se puede hablar de consenso cuando es imposición, no se puede hablar de interés general, cuando sólo beneficia particularmente a multinacionales".
Estos días también ha entrado en escena el Gobierno de España. El delegado en Andalucía, Pedro Fernández, ha reprochado este martes al Gobierno andaluz que "no ha hecho los deberes" con la regulación de los vehículos de transporte con conductor (VTC) por cuanto ha tenido un período de cuatro años para tenerla, de manera que afronta "una situación crítica a diez del vencimiento del plazo", el 1 de octubre, sin que lo haya hecho.
"Los VTC no están regulados en Andalucía, no pueden operar", ha colegido el delegado del Gobierno, para advertir consecuentemente que "se genera una crispación importante en los sectores vinculados al transporte de pasajeros, taxis o VTC".
Fernández se ha reafirmado en que la Junta de Andalucía "ha tenido tenido tiempo suficiente" para tener su normativa reguladora de los vehículos de transporte de pasajeros con conductor, un hecho que ha considerado "demostrativo" de que en el Gobierno andaluz "nos hacemos muchas fotos", pero "el contenido, el trabajo de fondo no se hace".