El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maetzu, ha comparecido este miércoles en el Parlamento de Andalucía para presentar el tradicional Informe anual de la Institución,en este caso de 2022. Y lo cierto es que las conclusiones esbozadas desde la tribuna de la Cámara no son precisamente para sentirse excivamente orgullosos. En total han sido 25.000 actuaciones en defensa de los derechos de la ciudadanía — 12.400 quejas y otras 12.700 consultas con respuesta, a lo que se incluye más de 600 acciones de promoción de derechos — para las más de 30.000 personas que han realizado una reclamación.
El protagonismo de la intervención ha estado en el retroceso en derechos de los ciudadanos y en el deterioro de los servicios públicos. Algunos de ellos directamente inaccesible para gran parte de la población debido a la llamada 'brecha digital'. Maetzu ha dio tajante en su diagnóstico inicial. "Es inadmisible que asumamos retrocesos en la garantía de nuestros derechos como algo cotidiano y normal", ha afirmado ante los diputados de los diferentes grupos parlamentarios.
El tema en el que más énfasis ha puesto el Defensor del Pueblo Andaluz ha sido la dependencia y la dificultad que muchas personas tienen para acceder a estas ayudas. Según los datos relativos al inicio de 2022, casi 40.000 personas se encontraban en la lista de espera.
Precisamente, la espera es el principal problema de estas personas. Maetzu ha narrado situaciones en las que los afectados pasan dos y hasta tres años desde que se apuntan para recibir la ayuda hasta que la reciben, el primero de ellos para ser evaluados y el segundo para recibir la cuantía correspondientes.
En ocasiones, incluso, la resolución positiva llega una vez la persona interesada ha fallecido. "Está dejando de sorprendernos que la resolución de los expedientes lleguen cuando las personas mayores han fallecido, incrementando de esta manera no solo el dolor de sus familiares, sino la desconfianza en las administraciones", ha manifestado. Sevilla, Málaga, Cádiz y Granada son las provincias más afectas.
"El reconocimiento de la discapacidad es la piedra angular de los derechos", ha señalado el compareciente antes de afirmar que sin ese reconocimiento las personas con alguna discapacidad carecen de cualquier tipo de derecho. La Junta anunció recientemente que unificaría el proceso de evaluación y concesión de las ayudas para comprimir los plazos.
No ha sido la única cuestión tratada en los escasos 20 minutos que Maetzu ha tenido para resumir un informe de 500 páginas. La violencia de género también ha tenido una presencia más que notable. En este sentido, el Defensor del Pueblo Andaluz ha mostrado su preocupación por el aumento de comportamientos machistas en jóvenes y adolescentes. Andalucía lleva nueve años siendo la comunidad con más mujeres asesinadas por este motivo.
Además, ha hecho un repaso por las cifras señalando que el número de asesinadas "no es asumible" para ninguna sociedad y ha pedido a las diferentes administraciones que pongan en marcha medidas para evitar que esta lacra continúe. Además, también ha explicado que preocupa especialmente lo que ocurre con los menores que quedan huérfanos y que son 78 en Andalucía desde el año 2003, año en el que se comenzaron a contar los datos.
"No se puede tratar la violencia de género como un problema exclusivamente de seguridad o justicia, sino que es fundamental analizar las causas estructurales y sistémicas de las violencias contra las mujeres y que el principio de igualdad de género se constituya como base de intervención y transformación de las políticas públicas", explica el informe.
El tercer tema que Maetzu no ha querido dejar pasar ha sido el de la sanidad pública. Y en esta cuestión ha enviado mensajes muy directos al Gobierno andaluz que preside Juanma Moreno. Desde el Defensor del Pueblo incidir en las listas de espera existente y, sobre todo, en los problemas que existen en la Atención Primaria. "Nunca ha habido tantas quejas a esta institución", ha mencionado sobre lo que afecta a esto último y la dificultad para acceder a citas presenciales.
Por ello, Maetzu ha hecho un llamamiento para que la Junta de Andalucía aumente la financiación para la sanidad, pero dejando muy claro que las mejoras sólo se pueden lograr con más "recursos públicos dentro del sistema público", haciendo clara referencia a posibles derivaciones y privatizaciones.
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