Una joven se ha hecho viral en redes sociales tras contar “la terrorífica historia” de su viaje en BlaBlaCar con un hombre. “Ni yo ni las otras dos chicas que venían conmigo vamos a usar BlaBlaCar en un tiempo”, apuntaba en un hilo de Twitter en que el que procedía a contar toda su historia.
“Este señor ha tenido a tres chicas, entre ellas yo, atemorizadas durante horas en un coche. Lo hemos pasado realmente mal”, comenzaba contando. Tal y como cuenta, el hombre pasó a recogerla y llevaba ya bastante tiempo a solas con las dos chicas que iban con ella en el coche.
“Desde el principio del viaje hicimos un grupo de WhatsApp por lo que pudiera pasar. El hombre no paraba de arrimarse a una de las chicas y hacerle comentarios babosos, además de presumir de haber sobado a otras tantas en un festival”, cuenta.
El hombre, que según la fuente iba desorientado y sin dormir quiso saltarse un peaje. “Atravesó la barrera de hierro del peaje llevándosela por delante, dándose a la fuga y pegándonos un susto de muerte. Ahí ya cualquier tipo de cachondeo desapareció”, cuenta asustada. Tuvieron que parar el coche porque a una de las chicas le dio un ataque de pánico,
“Antes de hacer la parada dijo que tenía el tanque vacío y que no tenía dinero para la gasolina, y que si queríamos llegar a nuestro destino tendríamos que pagársela. Me pidió repetidas veces dinero. En la parada nuestra compañera se tranquilizó un poco e intentamos hablar con él. Nos dijo que no tenía dinero y que era nuestra responsabilidad también por haberle hecho moverse. Empezó a ponerse agresivo conmigo para que se lo 'prestase'", narra.
El hombre le pidió hasta 35 euros por la gasolina y, cuando una de ellas intentaba razonar con él, les contestaba a en tono agresivo nuevamente: “Cállate que hablas mucho, no dejas hablar"”
“Al final, con el dinero que le dejamos llegamos a la primera parada y ahí salimos corriendo todas del coche. Los padres de una de las chicas estaban allí, advertidos. Le dijimos que no podíamos seguir con el viaje así”, cuenta la chica que además, añade que aun así el hombre se quejaba de que se bajasen: "Me vais a dejar tirado aquí sin gasolina".