Esta hermana criatura llamada dragón azul ha vuelto a las costas españolas. Varios de estos ejemplares han sido avistados en las playas alicantinas de La Mata, La y la cala de Las Estacas. El último que se había visto fue el año 1705, cuando el botánico Johann Philipp Breyne los vio en Ibiza.
Este bello animal, si bien puede parecer atractivo, puede ser bastante peligroso. Es un animal venenoso, y las toxinas las obtiene de sus presas, principalmente la vela púrpura y la carabela portuguesa. Así que si ves alguno este verano, tiene que tener cuidado de tocarlo y no debes pensar en cogerlo.
Estos animales son característicos de diferentes océanos del mundo. Concretamente del Atlántico, del Pacífico y del Índico, aunque son más fáciles de encontrar si nos aproximamos hacia aguas cálidas y templadas.
El 'dragón azul' originariamente llamado Glaucus Atalnticus es un molusco gasterópodo del orden de los nudibraquios. Su tamaño varía entre los 3 y los 4 centímetros de largo, y se caracterizan por una coloración azul plateada en su parte dorsal y unas rayas azules oscuras casi negras en sus extremidades.
Su aspecto inspiró el nombre común por el que se conoce a esta especie de babosa de mar que, a diferencia de los seres mitológicos, no vuelan, sino que se desplazan por las aguas de las costas sudafricanas, europeas, australianas, y también en aguas templadas y tropicales.