En los próximos días se llevará a cabo una de la periódicas reuniones de los obispos del sur de España, que la oficina de prensa de este grupo de prelados, Odisur, no ha concretado la fecha a lavozdelsur.es. No obstante todo apunta, según se cuenta en algunos medios y perfiles cofrades malagueños y onubenses, que uno de los temas estrella será poner coto a las procesiones extraordinarias.
Esta decisión, en cierto modo, se veía venir dado que a este asunto se le ha perdido la medida y más en poblaciones como Málaga que en menos de tres meses ha visto salir una treintena de ellas. Ahora parece que la iniciática limitará las procesiones solo a las coronaciones canónicas y sus conmemoraciones cada 25 años. Del mismo modo las celebraciones públicas por aniversarios fundacionales y sus múltiplos de 25. Nada de aniversarios de las hechuras de una imagen, de tal o cual aniversario u evento fuera de este marco.
En Jerez concretamente la normativa diocesana ya fija sólo estos dos supuestos para dar su visto bueno a una salida. Pero quien hace la ley hace la trampa y ciertamente han colado y están en espera otras solicitudes de cofradías con motivos que salen de estos dos epígrafes.
Manga ancha para procesiones 'extra'
No es menos cierto que tras la pandemia hubo gran manga ancha dándose permisos para extraordinarias, pero se ha llegado a una situación en la que los obispos quieren ponerse de acuerdo para frenarlas. El dato de Málaga es un ejemplo pero atrás no se quedan otras ciudades como Sevilla, con cuatro pasos de Semana Santa en extraordinarias, y Córdoba donde incluso se han produjeron quejas ciudadanas porque alguna de las salidas se adornaron con fuegos artificiales en las recogidas a las tantas de la madrugada.
Otro tanto sucede con las magnas. Este otoño han sido varias: Cadiz, Antequera, Málaga y en Sevilla para el Sábado Santo de 2023. Estas convocatorias excepcionales sí compete al obispo del lugar permitirlas o no siempre con el soporte de un motivo de peso. En Jerez, como adelantó a este medio el presidente de la Unión de Hernandades, hay dos proyectos de magnas los próximos años. En este otoño las salidas en la ciudad han sido menos en comparación con años precedentes.
Desnaturalización y hartazgo
Al sentir de los purpurados se une el de no pocos cofrades que piden una limitación a esta desmesura que desnaturaliza el ser de una hermandad de penitencia, que tiene sus fechas propias, la Semana Santa, y el hartazgo que provoca en propios y extraños.
Así las cosas, sobre la mesa de los obispos de sur está el asunto. Todo apunta que saldrá adelante dado que, como en Jerez, y seguramente en otras diócesis andaluzas también, ya está regulado en similares términos al que tratarán los prelados.
El latiguillo, que se usa cada vez con más frecuencia, acuñado en Jerez por los ex obispos Del Río y Mazuelos, lo extraordinario ya es ordinario. Habrá que ver si en la deriva de esto puede más la presión cofrade que lo que mandan los obispos.