"La mejor Semana Santa del mundo"
Pablo Baena Rodríguez, pregonero de la Semana Santa de Jerez. Fue nombrado en 2020 pero al suspenderse el acto durante ese año y 2021, a causa de la pandemia, se ha visto en la inédita situación de ser pregonero de facto desde hace dos años. Tiene 44 años de edad, licenciado en Filología Hispánica y máster en Educación. Ejerce como profesor de Lengua y Literatura en secundaria en Sevilla. En lo cofrade, en Bornos, es hermano de la Resurrección, del Nazareno y de la Veracruz y hermano mayor del Rosario, patrona de la localidad. En Jerez es hermano de la Sed y de la Sacramental de Santiago. En Arcos pertenece a la del Rocío. Su currículo pregonero y actos líricos es extenso. Destacar los pregones de Semana Santa de Bornos, Villamartín y La Barca de la Florida. También, en Jerez, ha ofrecido el pregón del Nazareno, la meditación sobre las ‘Siete Palabras’ en el Cristo, la Exaltación Poética a la Misericordia, del Transporte, y el ‘Stabat Mater’ a los Remedios, entre otras.
Dos años esperando, ¿será por fin este 2022?
Espero con la misma ilusión que en mi primer nombramiento la llegada de una Semana Santa normal, si es que la de Jerez puede calificarse como normal, porque para mí siempre es extraordinaria. Pero ya, imagino, sabes a qué me quiero referir. Tenemos que volver a las calles a hacer pública manifestación de nuestra fe con renovadas ilusiones. Y, si hay una Semana Santa normal, debe haber también un pregón normal.
Su caso es excepcional debido a la pandemia por lo que el primer pregón encargado para 2020, ¿tendrá poco que ver con lo que oiremos este año? ¿Queda algo de aquel primero?
Personalmente me queda, y multiplicado por tres, el honor de pregonar la que para mí es la mejor semana santa del mundo. Y digo esto porque es la que yo he elegido, soy de Bornos, he vivido en Sevilla durante diez años, aunque ya me he mudado a Jerez, y aún así, desde hace ya muchísimos años, la Semana Santa, desde el punto de vista cofrade, la paso y vivo en Jerez por elección propia. En cuanto al pregón, como anuncio que es de la Semana Santa, está sujeto a una parte permanente y una parte efímera: hay una Semana Santa que se mantiene y que se renueva cada año: en este caso hay un nuevo consejo, un nuevo obispo, cofradías que se han añadido a la Carrera Oficial y ya no son de vísperas; y ha habido acontecimientos sociales y eclesiásticos de la suficiente relevancia como para ser tenidos en cuenta.
"Tengo el honor de pregonar la que es para mí la mejor Semana Santa del mundo"
¿Cuántas vueltas le has dado al texto?
Muchas. Aunque sí que es verdad que estuvo un tiempo aparcado. Pero, como digo, hay que reilusionarse con lo que se nos viene y será la Semana Santa de nuestra vida. Seguro.
¿Puede definirnos su pregón?
Mi concepto de pregón es el de un texto retórico con unas características definidas y me tengo por una persona bastante tradicional en estos menesteres.
¿Le teme al Villamarta?
Temor no, pero sí le tengo muchísimo respeto. Al que le gustan las cofradías de capa, se apunta a esas, al que le gustan las de esparto, hace lo propio con las de su gusto; el que prefiere las bandas de cornetas, escucha esa música y el que disfruta con una agrupación musical, se adhiere a ese registro. Esto pasa con todo: con un restaurante al que se va a cenar, un espectáculo al que se va de público, un evento deportivo al que se asiste... Todo eso tiene un público muy homogéneo. Pero al pregón de Semana Santa va un público muy plural: asiste quien le gusta el evento en sí, quien acompaña al pregonero por afecto personal, quien va por compromiso, quien le gusta un formato, quien prefiere otro... Jerez es, además, una plaza de primera y con un atril de un altísimo nivel desde el que se han pronunciado textos sublimes y hay que dejarse la piel por intentar estar a la altura.
"No temo al Villamarta pero sí le tengo muchísimo respeto"
¿Tiene pensado el formato o el hilo conductor?
Sí. Ya le digo que con mi personalidad combinan bastante mejor los formatos tradicionales.
¿Será crítico o sermoneará?
No creo que el pregón de semana santa deba servir para violentar a nadie. Eso no quita que no deba ir de la mano de la radicalidad del mensaje del evangelio y los cristianos estamos llamados a dar un testimonio de fe en toda ocasión que se nos presente.
¿Qué opina de la vigencia o validez del pregón en la actualidad? ¿Está obsoleto el formato? ¿Hay que innovar?
Como decía antes, hay gustos para todos. En los últimos años ha habido pregones en los que se han incorporado actuaciones de artistas que me han parecido extraordinarias y, que con mi personalidad vaya a lo mejor un formato más tradicional, no me impide valorar sobremanera esas nuevas formas que, además de valientes, abren un nuevo campo a un acto que, no por tradicional, debe ser encorsetado.
"No creo que el pregón deba servir para violentar a nadie"
Por cierto, ¿innova en su pregón o se mantiene en línea con lo tradicional?
Mi herramienta de trabajo es la palabra y haré uso de ella a la hora de cumplir con la encomienda.
¿Tiene referentes en el mundo pregonero?
Mi nombramiento me permitió conocer personalmente a una serie de señores, con mayúscula, que me han precedido en el atril del Villamarta. Me han acogido como nadie puede hacerse una idea y, además de un imposible, sería una descortesía por mi parte referir ningún nombre en concreto porque he aprendido mucho de su oratoria, del diálogo con ellos y de sus experiencias compartidas conmigo.
"Los cofrades son los que, guste o no, siguen llenando las iglesias y las calles"
Hablando de hermandades en general. ¿Cómo observa el movimiento cofrade en Jerez?
Creo que goza de buena salud. La gente tiene ganas y, al fin y al cabo, los cofrades son los que, guste o no, siguen llenando las iglesias y las calles. Pero quizás con una asignatura pendiente: la de ir aprovechando el exceso de afición para que vaya creciendo desde ahí la devoción. Y eso es responsabilidad de todos.