Cofrade sí o sí: nació un Domingo de Ramos
Francisco Zurita, 56 años, hermano mayor del Desconsuelo, cumpliendo tras la Semana Santa. Es economista de profesión, casado y con dos hijos, uno de ellos, Juan Manuel, le presentará. Su afición por la literatura y la poesía siempre ha estado presente en su vida. De hecho cuando hizo la ‘mili’ ganó un de redacción por el que obtuvo 10.000 pesetas de premio. Finalmente, durante 30 años ha trabajado en la banca.
Es de alma inquieta. Le gustan lo retos y estar en activo pese a que ahora vive en la tranquilidad de estar pre jubilado. Pero esa tranquiklidad no va con él; tiene a quien salir. Su progenitor ya puso en evidencia que lo de estar quieto no casa con el apelido Zurita.
Nació el Domingo de Ramos del 67. Su padre, el inconmensurable Santiago Zurita, le inscribió como hermano y lo bautizó delante del palio del Desconsuelo el Martes Santo, dos días después de nacer con su madre en el hospital. Lo del pregonero con los domingos es particularmente curioso, porque el día de su venida al mundo fue a las 20 horas, cuando estaba saliendo Las Angustias, la hermandad de su abuelo. Confiesa que su abuela, que ya era viuda, rezaba porque naciera el Domingo de Ramos .
Su experiencia en los atriles cofrades no es que sea excesiva pero sí intensa y la justa. No se ha negado a asumir cuantas propuestas le han llegado y les ha convencido. Ahora le llega el reto máximo al que puede aspirar un cofrade con talento para la prosa y el verso.
Y tanto. No sé si Dios me llamará arriba también un domingo, pero estaré con la carnes abierta cuando llegue el domingo. Pero bueno todo será para bien o para mal.
Que me vean como un enamorado de Cristo y de las hermandades, un enamorado de la Virgen. La verdad es que soy un enamorado de Jerez, de mi tierra, de las cofradías, de nuestra Semana Santa. En el pregón trato de dibujar la Pasión del Señor según la vivimos aquí, creo que es mi mejor carta de presentación.
Va a ser la Semana Santa. La Pasión va a ser mi hilo conductor. Y a partir de ahí van a colgar vivencias, van a colgar hermandades que colaboran o participan necesariamente en esta pasión, cómo se vive en Jerez. Pero fundamentalmente el hilo conductor va a ser la Pasión del Señor, que es lo que motiva la Semana Santa.
Pues voy a criticar comportamientos cofrades que dejan mucho que desear. Tenemos que tomar conciencia de las cosas que no hacemos bien para hacerlas mejor, para corregirlas. También es un canto a la alegría, porque la Pasión acaba bien y debe ser un canto de esperanza, de lo que significa todo lo que Cristo nos dio y nos regaló con su vida, con su muerte. Y también va a ser un canto meloso, porque todo este mundo es tierno, es hermoso, es bello, dulce, es dulce. Y trataré con mis palabras de describir esa belleza y esa dulzura que tiene nuestra Semana Santa.
"No sé si dentro de diez años lo haria mejor (...) Ahora estoy prejubilado y a la espera de nuevas aventuras..."
La campana viene sonando de hace un buen tiempo. Ha habido gente muy importante en el mundo de los pregones que públicamente ha manifestado su deseo y su convencimiento de que yo tenía que ser pregonero. Pienso en personas como Zarzana, Andrés Cañadas padre y hijo, en Pepe Castaño, Enrique Víctor de Mora, muchísima gente que no solo son pregoneros, también capataces, hermanos mayores que han apostado por que yo sea pregonero. Doy gracias a Dios porque no haya sido pregonero hasta ahora, porque las cosas que habría escrito hace diez años no son las que hoy escribo, o no lo escribiría de la misma manera. Y creo que la edad ha venido bien en este sentido para animar a ese Paco Zurita de hace diez años. No sé si dentro de diez años lo haría mejor o peor, porque ya uno empieza la curva del decrecimiento intelectual. Ahora estoy prejubilado y a la espera de nuevas aventuras... (sonríe)
No, no es por arrojo, se van puliendo las formas, se va poniendo el estilo, se van ampliando recursos, el conocimiento, la experiencia, pues todo eso hace que la edad también sea un factor positivo. Acabo de cumplir 56 años, según mi mujer, una edad estupenda para un hombre y yo me lo creo. Qué remedio me queda… Pero lo que sí es verdad es que ahora me encuentro bien de forma. Tengo ganas de hacer cosas, tengo ganas de empezar nuevos proyectos, nuevas ilusiones y creo que todo eso me ayuda a que el pregón salga lo mejor posible.
A mí me gusta mucho la poesía. La poesía va a estar presente en el verso y en la prosa. Y habrá bastante más verso que prosa, sobre todo mucha décima encadenada, que es el verso que a mí más me gusta para los pregones. Hay otros versos que también me gusta practicar en otras cosas que escribo, como pueden ser los sonetos, los tercetos encadenados como, por ejemplo, lo de la elegía de Miguel Hernández a su amigo Ramón Sijé. Pero fundamentalmente lo que hay en el pregón es décima encadenada, que ya practica muy bien ingenios como Francisco Montero Galvache, Antonio Gallardo, Antonio León Manjón…
Son gente muy importante a los que admiro profundamente. Son para mí modelos de cómo hay que escribir y cómo hay que hacer un buen poema. También hay romance. El romance lo practico poco, pero es bonito y muy musical. Le gustaba mucho a Lorca, como el Romancero Gitano y para el mundo cofrade es muy bonito el romance. Hay algo de pareados, también hay algo de verso libre.
"Hay bastante más verso que prosa en el pregón"
La poesía me gusta desde niño. Soy un estudioso de la poesía porque me ha encantado. Soy un obseso de la métrica. Me chirría cuando un poema tiene una sílaba de menos o de más. La métrica tiene sus reglas. Soy muy obseso con la rima. Sí, desde ese punto de vista técnico lo cuido mucho.
Es un factor más que ayuda.
Ayuda a que el pregón resulte redondo. Porque hay verdaderos artistas que escriben muy bien, pero si les faltan a la métrica, chirrían. O hay algunos que tienen una métrica perfecta pero no dicen nada o son pobres de contenido. Y un pregón tiene que tener contenido, tiene que tener belleza, tiene que tener equilibrio, tiene que también tener una cierta perfección técnica para que sea redondo. Todo eso lo he intentado y si lo consigo o no, lo veremos.
Sí, sí. El pregón lo terminé hace mucho tiempo. Lo terminé en el mes de noviembre. Lo he repasado y leído unas cuantas veces, y cada vez siempre encuentro algún pequeño error que trato de corregir, alguna terminación que es mejorable, un fallo tonto. Como tengo formación matemática soy muy cuadriculado para para las terminaciones, para la rima.
Ese ha sido uno de mis caballos de batalla. Todas las cosas que he hecho han durado aproximadamente unos 35 minutos. El pregón de la Semana Santa de Jerez no puede durar 35 minutos, entre otras cosas porque hay 45 hermandades y quiero hablar un poquito que todas. Eso es muy complicado y ese ha sido uno de mis grandes caballo de batalla. Aún así, creo que va a ser el pregón más corto de los últimos años. Nos iremos con todo a unas dos horas y algo, no más, con la presentación y todo lo demás.
"Sonarán 'Mater Desconsolata' de Beigbeder, 'Estrella Sublime' en honor a la coronación de La Estrella y 'Soleá dame la Mano', la marcha que más me llena"
Eso para mí es muy importante. Yo soy, como dijo el padre Agustín, que me casó, ‘si quieres matar al fraile, quítale la siesta y dale de comer tarde’. El pregón de Jerez durará más de lo que yo hubiera querido, pero menos de lo que viene siendo los últimos años. Es muy complicado cuadrarlo; ha sido una de mis obsesiones.
La primera Mater Desconsolata, de Álvarez Beigbeder dedicada a la Virgen del Desconsuelo. Una marcha muy bonita, muy poco conocida. Sonará Estrella Sublime, un detalle hacia La Estrella en el año de su coronación canónica. Y finalmente, Soleá dame la mano, de Font de Anta, que es la marcha que a mí más me llega. Es una marcha que me levanta el vello y que escucho una y otra vez porque es realmente preciosa.