Quienes hayan pasado estos días de Semana Santa por Cristina, cerca de la puerta del cuadro de la Virgen del Rocío que hay en la iglesia de Santo Domingo, se habrán percatado de la nube de mosquitos que, traídos por las altas temperaturas, se han concentrado en la citada zona.
Mosquitos que se quedan pegados en la ropa de los que esperan en el paso de peatones para cruzar hacia el otro lado, que se cuelan por la boca cuando estás hablando con el de al lado y que se convierten en un auténtico incordio para los que están viendo el discurrir de las hermandades en los palcos.
Unos mosquitos que han sido protagonistas de una de las imágenes más curiosas que ha dejado este Martes Santo.
En los referidos palcos de Cristina, tres personas han recurrido a un pañuelo, que se han colocado sobre la cabeza y cara, para protegerse de los molestos insectos.