A las 21 horas de este Miércoles Santo la única hermandad que procesiona por las calles de Jerez, Las Tres Caídas, ha acelerado el paso ante el inicio de los chubascos que amenazaban en los partes toda la jornada. La última hora es que el crucificado de La Salud y la María Santísima de los Dolores se han quedado refugiados de momento en la Catedral, aunque está prevista su salida para regresar esta misma noche al santuario de San Lucas.
Esta alarma por lluvia y el fuerte viento han provocado que el resto de cofradías que iban a realizar estación de penitencia a la Catedral decidieran finalmente quedarse en sus templos.
Una de las decisiones más difíciles ha estado en la Iglesia de Santiago, donde la junta directiva del Prendimiento decidía no poner a la hermandad en la calle, sobre todo en este caso, por el viento. "No ha habido divergencia; los partes estaban clarísimos y, aparte de la lluvia, el problema para nosotros era el viento, para el olivo (que acompaña al misterio)".
"Si te mete una ráfaga de viento de 70 u 80 kilómetros por hora, que es lo que se pronostica, podemos tener un problema y un disgusto. Poner el patrimonio humano en la calle...", ha afirmado, en declaraciones a Onda Jerez, el hermano mayor del Prendimiento, Paco Cebrián, que al tiempo ha asegurado que se encuentran "muy tristes", pero "los hermanos nos han dado la razón en esta decisión de la junta de gobierno porque ellos también son conscientes".
Ha sido raro no ver un Miércoles Santo al Prendi en las calles de Jerez, pero la noche ha terminado de dar la razón a la junta de gobierno de la señera hermandad jerezana, al igual que al resto de hermandades, Soberano Poder, El Consuelo, y Amargura, que decidieron quedarse en casa en esta Semana Santa desabrida y para olvidar.