Controvertido acuerdo el que se ha comunicado esta noche desde la Unión de Hermandades: el Santo Entierro abrirá el Viernes Santo. Así se ha decidido tras la reunión mantenida con los responsables de las cofradías del Viernes Santo.
El Consejo afirma que “los hermanos mayores de la jornada decidieron que la Hermandad de la Piedad sea la que abra la jornada”. Pese a que la cofradía del Calvario daba por buena la resolución de Mazuelos de 2019 de iniciar el regreso desde Asuncion, sin pasar por la Catedral, se ha impuesto dar absoluta prioridad al principio de que todas tienen que hacer estación de penitencia en el primer templo diocesano, algo que al parecer quería el propio Rico Pavés, por encima de otras consideraciones, entre ellas, la estética.
El sentido común señala que el Santo Entierro debe cerrar el paso por la Carrera Oficial por lo que representa y por el carácter institucional de la procesión. Pero no será así y habrá que conocer las reacciones a ese acuerdo, sobre todo en la cofradía afectada.
El fin de todo esto es “evitar así su recogida a altas horas de la madrugada. De esta forma, será la primera en hacer estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral en la jornada del Viernes Santo”. Así concluye el escueto comunicado del Consejo, una medida que no pega ni con todos los argumentos que se quisieran usar para que encaje.
En la noche del lunes se cerraron las reuniones con las hermandades por día de salida. En Curtidores no acogían con agrado el ‘permiso’ que Mazuelos dio a la hermandad bajo la premisa de que donde está el obispo está la Catedral. Tampoco se esperaba que la solución fuera pasar la primera. Al no tener que ir a la seo, La Piedad se ahorraba más de dos horas en la calle e iría por delante de La Soledad. Ahora, al encabezar la jornada, el primer handicap es la hora a la que tendrá que salir. Algunos calculan que deberá hacerlo antes de las cinco de la tarde.