“Este centro cultural, sede del Ateneo Arbonaida, fue inaugurado por la descendencia de Casto Moreno Vargas, a quien la represión y el odio obligaron a cambiar su nombre. Hombre de valor y rebeldía, comprometido con la libertad de pensamiento y los derechos de los más desfavorecidos, entregó su tiempo y su vida a inculcar los valores del conocimiento y la cultura a quien no tenía más que sus manos para trabajar”, se puede leer en una placa que hay a la entrada de un local en el que se amontonan las cajas, en la Casa de Postas de El Cuervo, hasta ahora sede de una entidad cultural que ha sido desalojada.
José Moreno Vargas El Mojiconero fue fundador del Ateneo Amantes del Progreso en torno al año 1934, primero de la historia de la localidad sevillana de El Cuervo. “Nos inspira hoy con su recuerdo y su legado en la persecución de este ideal”, recalca el mensaje de la placa. Gonzalo Amarillo, socio fundador del Ateneo Arbonaida, heredero de aquella entidad, lo complementa: “Hemos cogido el legado de El Mojiconero, que dedicó su vida a luchar por los débiles. Este hombre terminaba de trabajar y se iba a las gañanías a enseñar a leer y escribir a otros jornaleros analfabetos. Tristemente fue fusilado y sometido al exilio y más de 80 años después, simbólicamente, vuelve a ser exiliado. Pero mientras sigamos adelante su legado y su memoria van a seguir caminando”.
En la que es la sede del Ateneo de El Cuervo desde 2015, las estanterías ahora están vacías y en el centro de la estancia se amontonan cajas con sus pertenencias. En lugar de dedicar los meses de verano a seguir organizando actividades, los miembros de esta entidad cultural están sacando tiempo de donde pueden para desalojar el espacio que ocupaban en la Casa de Postas de la localidad, de propiedad municipal, que el Ayuntamiento quiere que vacíen para ubicar a la Escuela de Música. El convenio firmado entonces establecía el uso de las instalaciones municipales durante un año, prorrogable hasta otros dos, pero expiró y, a pesar de los avisos del Ateneo, el gobierno local no renovó el acuerdo.
"La Escuela de Música ha sido la excusa para echarnos", cuenta Concha Mingorance, cuando atiende a lavozdelsur.es. Ella fue quien se enteró, "accidentalmente", de la intención del Ayuntamiento de ejecutar este "desahucio cultural". "Llevamos diez años luchando para tener una Escuela de Música", dice, "pero éste no es espacio para ello". "Sentimos mucha impotencia y frustración por este acto parcial y arbitrario que va en contra de un colectivo que reivindica los intereses del pueblo", añade Mingorance. Gonzalo Amarillo, socio fundador de la entidad, critica que fueron "los últimos en enterarse" de esta decisión y que "a día de hoy no hay proyecto para la Escuela de Música".
El Ateneo Arbonaida, en una contrapropuesta presentada al Ayuntamiento, propuso compartir el espacio que ocupa en la Casa de Postas con la Escuela de Música. En este lugar, adecuado con mobiliario, estanterías, una biblioteca con 600 volúmenes o un equipo audiovisual costeado por la entidad cultural —que ha invertido más de 10.000 euros en todo ello—, se han organizado talleres de pintura, movimiento expresivo, trabajo corporal consciente, salud y mujer, flamenco, el club de lectura de mayores, el club del vino... "Hemos sido los únicos que hemos dado actividad cultural diaria en el pueblo", aporta Amarillo.
¿Por qué este "desahucio cultural"?
Los miembros del Ateneo Arbonaida no tienen pruebas, pero tampoco dudas, de que su oposición frontal a la tala de 43 casuarinas impulsada por el Ayuntamiento, la mayor masa arbórea de El Cuervo, y la consiguiente movilización ciudadana para impedir lo que entendían como una injusticia y la pérdida de un patrimonio medioambiental de gran valor para la localidad —tasado en más de 215.000 euros, según el informe elaborado por la empresa Tecnigral—, tiene mucho que ver en la decisión final del gobierno local.
"Al final te tienes que guiar por los indicios, y después del desencuentro por la poda de las casuarinas, y de la polémica por la mutilación de la Tenencia de Alcaldía, la relación ha sido muy tensa", dice Gonzalo Amarillo. "Como colectivo molesto que somos nos han dado donde más nos podía doler, y hemos estado a punto de tirar la toalla", confiesa. Y es que esta entidad sin ánimo de lucro, que se financia con las cuotas de sus socios —unos 90 en una localidad de 8.600 habitantes— y con los talleres que imparte, aunque lo recaudado se destina a costear materiales y el pago a los monitores, ya tiene nueva sede, un local cedido por un empresario local, de forma gratuita durante el primer año.
"Ahora tenemos que cambiar el chip, para poder reorganizarnos y afrontar gastos, sin perder de vista lo que somos y por qué existimos, que no es otra cosa que seguir creando cultura popular", señala Gonzalo Amarillo. "Cada euro que gastemos en mantener un local es un euro que dejamos de gastar en actividad para el pueblo", lamenta. "Tendríamos que estar haciendo las actividades de verano y estamos de mudanza", dice. Después del periodo estival esperan estar instalados en su nueva sede.
El Ayuntamiento, en un primer momento, les propuso alojarse en el Área de la Mujer de la localidad, primero en un despacho y luego en una planta entera, pero lo rechazaron. "Por dignidad y honestidad no podíamos aceptar un espacio a dedo", explica Amarillo. El Ateneo Arbonaida nació a finales de 2012 como "un acto de rebeldía", para agitar una localidad muy necesitada de acciones y eventos culturales. La entidad, que cuenta con una junta directiva de una decena de vecinos y vecinas del municipio, lleva desde entonces organizando todo tipo de talleres y eventos, para todas las edades, que vienen a cubrir la "carencia cultural" que tenía El Cuervo. "Nos propusimos generar un movimiento cultural alternativo", dice Amarillo, "teniendo como bandera la cultura andaluza".
Más apoyo "fuera" que "dentro"
La noticia del "desalojo cultural" del Ateneo Arbonaida removió al movimiento ateneísta andaluz. El presidente de la federación Ateneos de Andalucía, Juan Gaitán, hasta dirigió una carta al alcalde de El Cuervo, el socialista Francisco José Martínez, para que reconsiderara su postura. "Usted sabe que los ateneístas de El Cuervo han sido quienes han realizado una intensa y eficaz labor de adecuación y equipamiento de la Casa de Postas, dotándola de estanterías, una biblioteca para todos los públicos, equipo audiovisual, mobiliario, iluminación y calefacción, además de organizar actos culturales de todo tipo y para todos los públicos. Sería una tremenda injusticia que, tras todo este esfuerzo, ahora recogiese los frutos quien no los ha sembrado", señalaba en la misiva.
"Cultura, libertad, independencia y Andalucía", son las palabras que, para la plataforma Andalucía Viva —que aglutina a un centenar de colectivos de la comunidad—, definen al Ateneo Arbonaida. "Cualquier pueblo se partiría la cara por contar con un espacio de encuentro que reúna estas cuatro palabras, tan necesarias en los tiempos que corren. No sólo han conseguido movilizar a su ciudadanía en torno a estas cuatro palabras, sino que El Cuervo de Sevilla es reconocido en Andalucía gracias a su inmensa labor activista y cultural", sostenía en un comunicado.
"Hemos tenido conocimiento de la voluntad del Ayuntamiento para proceder al desahucio de su sede en la Casa de Postas. Allí se han dejado media vida, creando una biblioteca abierta a toda la ciudadanía, aportando infraestructura audiovisual y de toda índole de la que carecía, convirtiéndola en un espacio abierto, multifuncional y compatible con la realización de otras actividades", señalaba.
"Tenemos más reconocimiento fuera que dentro, se nos ve con reticencia sobre todo en las esferas del poder", dice Amarillo. "Pero nuestra trayectoria está ahí. Los proyectos empezaron a pico y pala, poniendo dinero de nuestros bolsillos, y cuando echamos la vista atrás y vemos todo lo realizado... el volumen de actividad, para los pocos que somos, ha sido bestial". "Con el tiempo creo que se pondrá realmente en valor. El hueco del Ateneo sería complicado de rellenar", recalca.
¿Qué dice el Ayuntamiento de El Cuervo?
El desalojo, para la delegada de Cultura del Ayuntamiento de El Cuervo, Carmen Beato, es “solamente administrativo”, ya que el Ateneo Arbonaida podrá seguir utilizando el espacio de la Casa de Postas que ha obligado a dejar vacío. Por este motivo, eventos como el festival flamenco La Choza de Juaniquín, reconocido en muchos puntos de España, no tienen asegurada su continuidad. La delegada, en declaraciones recientes a Lebrija Flamenca, dice que el gobierno local quiere "seguir apostando por La Choza", lo que demuestra con una partida destinada a financiar el evento.
Beato, para justificar el desalojo, contaba en una rueda de prensa de hace unos meses que la intención del Ayuntamiento era crear una "base sólida" para la Escuela de Música Municipal, unificando el Aula de Música y la Escuela en un mismo espacio. "Queremos darle estabilidad y realce a la Escuela de Música", recalcaba. "Mi deber es velar por el interés general del pueblo y de todas las asociaciones", señalaba. La delegada anunciaba que el Ayuntamiento sacará a licitación la ocupación de la Casa de Postas, para que se adjudique mediante concurrencia competitiva.
"Tenemos que darle la oportunidad a todas las asociaciones que necesiten espacios que el Ayuntamiento tenga disponibles", decía la delegada. "El Ayuntamiento no tiene la obligación, ni las asociaciones tienen el derecho exclusivo de que les cedamos ese espacio, pero está en nosotros favorecer todo lo que podamos a las asociaciones", aseguraba la delegada de Cultura, que esperaba que "no surjan más conflictos", ya que "tenemos que remar todos por la cultura".
Concha Mingorance, miembro del Ateneo Arbonaida, asegura que "se podía haber buscado una alternativa" antes de verse en la calle. "La decisión estaba tomada de antes", sostiene. Gonzalo Amarillo, echando la vista atrás, asegura que de lo que más orgulloso está es de "haber mantenido nuestro perfil alternativo, de pensamiento crítico, y la independencia del Ateneo". Basados en esos valores, inician una nueva etapa, fuera ya de la Casa de Postas.