Carmona, ciudad bravía: a pesar de las tabernas, ya tiene librería

José Manuel Camacho inaugura Buks, un lugar donde las páginas vencen a las pantallas y los libros superan el reto del clic fácil

José Manuel Camacho, en su recién inaugurada librería Buks.

En la calle Real de Carmona, la vía que conecta los arrabales con el casco histórico, ha abierto un espacio inesperado: una librería. Es casi una paradoja en la ciudad donde la coplilla decía que era la de las “ciento veinte tabernas y ninguna librería”. Pero José Manuel Camacho se ha propuesto desafiar la estadística con Buks. Este refugio de historias y papeles es la única este municipio de Sevilla y nace con una misión más allá de la venta de libros: ofrecer un espacio cultural que revitalice la vida local en una época dominada por la compra digital.

El impulsor de esta iniciativa no proviene de un entorno literario, sino arquitectónico. “A mí siempre me gustaron los libros y realmente esto no tiene mucho que ver con mi profesión, yo estudié arquitectura”, comenta entre risas. Sin embargo, la pandemia y la vida familiar le obligaron a buscar un cambio de rumbo. Así, tras varios años de trabajo en un estudio, se vio en la encrucijada de encontrar algo que le permitiera conciliar con su vida personal y que, además, respondiera a su pasión por la lectura.

El camino hacia la inauguración del local empezó con la fundación de su propia editorial, ‘El Búho Ediciones’, hace dos años. “Hemos estado haciendo servicios editoriales a escritores que se quieren autopublicar”, recuerda Camacho. Fue su suegra, Margarita Hans, quien le inspiró en este paso, ya que ella, funcionaria del Ayuntamiento de Carmona y también escritora, le mostró los obstáculos que los autores enfrentan en el mundo editorial. “Uno de los inconvenientes que se encuentran los escritores es que les piden una cantidad enorme de dinero y luego no cumplen. Yo intento ir de la mano, hacemos sobre todo coedición y servicios editoriales”. Su experiencia ayudando a escritores a autopublicar le permitió conocer los esfuerzos detrás de cada libro, así como detectar una necesidad cultural en Carmona: un espacio en el que los lectores y autores locales pudieran encontrarse y disfrutar de un ambiente que Amazon, con su eficiencia de un solo clic, no podría igualar.

Camacho junto a Margarita Hans, escritora local y suegra del dueño de la librería, con un ejemplar de su editorial ‘El Búho Ediciones’. MAURI BUHIGAS

Un concepto diferente

Cuando este joven decidió abrir Buks, tenía claro que no se trataría de una librería convencional. Inspirado por rincones como La Señorita Esquivel en Mairena del Alcor, imaginó su local como un espacio cultural inclusivo. “Quería hacerlo diferente, que fuera un sitio social, de reunión, en el que haya eventos, cuentacuentos para los niños, incluso de pintura; que no sea comercial y punto, sino que sea un centro cultural”, comenta. La diferencia radica en convertir el espacio en un nexo, donde cualquier persona pueda sentirse bienvenida a compartir una afición común. 

Desde su inauguración, la respuesta ha sido muy positiva. “Increíble. Hay una imagen de una niña saltando de alegría porque estaba el libro que ella estaba buscando que no se me va de la cabeza. Y tantísima gente que me ha dado la enhorabuena”, expresa emocionado. Este recibimiento por parte de los carmonenses ha reforzado su creencia en que Buks puede convertirse en un pilar cultural de la ciudad, una nueva “taberna” para quienes buscan alimentar el espíritu a través de los libros.

Talleres, cursos y grupos de lectura

Para hacer de Buks algo más que una librería, ha diseñado una oferta variada de talleres. La escritura creativa ha sido el taller con mayor éxito, aunque otros, como el de autobiografía y guion teatral, también han despertado mucho interés. Además, como respuesta al creciente interés de los jóvenes por el manga y la cultura japonesa, ofrece un curso de iniciación al japonés, pensado especialmente para adolescentes. “Es más, vamos a preparar una sesión de manga, que ya tengo los libros solicitados”, comenta.

Este enfoque en talleres y actividades permite a Buks ir más allá de la venta de libros, fomentando un ambiente de aprendizaje y creatividad donde los vecinos pueden explorar nuevas facetas culturales. En palabras del dueño, “la idea es que Buks sea un espacio vivo, un lugar donde la gente se sienta cómoda y pueda descubrir nuevas formas de disfrutar la literatura y las artes”.

Camacho atiende a una clienta en su local, preparado también para charlas y talleres. MAURI BUHIGAS

Para José Manuel, la clave está en crear una comunidad de lectores y autores, un esfuerzo que ha comenzado con la creación de clubes de lectura y una sección dedicada a autores locales. “Lo que pretendo también es darles la oportunidad de que tengan visibilidad”, expresa. Con esta iniciativa, lo que busca es apoyar a aquellos escritores que no encuentran espacio en las grandes cadenas, ofreciéndoles conectar con el público local. También ha puesto en marcha clubes de lectura, incluyendo uno de fantasía y otro de novela romántica, que han sido bien recibidos por sus parroquianos. “El objetivo del primer año es llegar a los cien”, señala, confiado en que seguirá creciendo y ganando adeptos en la ciudad.

Competir con Amazon: un desafío constante

En la era de la venta online, el mayor desafío para una librería independiente como ésta es competir con gigantes como Amazon, que ofrecen precios bajos y la conveniencia de la entrega a domicilio. Consciente de esta dificultad, el gerente de Buks ha implementado estrategias para atraer a los clientes y ofrecerles una experiencia que Amazon no puede replicar. “Voy a igualarlo... sacaré unas tarjetas de socios en el que les haré un 5% de descuento igual que ellos”, afirma. A este incentivo, se suma la posibilidad de disfrutarla como un lugar cómodo y acogedor. “Estoy intentando hacer que sea un sitio en el que te encuentres como en casa. Yo, al menos, cada vez que entro aquí me lleno de energía”, añade.

Uno de los rincones de la librería Buks. MAURI BUHIGAS
La lectura, una pasión de madres a hijas. MAURI BUHIGAS

Para Camacho, competir con Amazon no solo implica ofrecer descuentos, sino también cambiar la mentalidad de los consumidores y hacerles ver el valor de una visita entre millones de papel y narraciones. Según él, la diferencia clave está en la experiencia de descubrir un libro mientras se pasea entre las estanterías, una sensación que solo tocando puede brindar. La decoración, el ambiente, los encuentros entre lectores y autores, son elementos que Amazon no puede ofrecer y que Buks, situada en el corazón de la calle Real, pone al alcance de los vecinos de Carmona.

Libros de segunda mano y visibilidad para los autores

El compromiso con la sostenibilidad y el fomento de la lectura se refleja también en su sección de libros de segunda mano, que ofrece una segunda vida a aquellos ejemplares que ya no tienen lugar en las estanterías de sus dueños. “Muchas personas tienen libros en su casa que no leen y que están allí cogiendo polvo”, explica. Esta sección permite a los clientes acceder a obras descatalogadas o difíciles de encontrar, ampliando así la oferta de la librería y su atractivo para el público.

Además, sueña con crear un premio literario local que reconozca el talento de los escritores: “Ayudar a los autores locales a que sus libros puedan ver la luz creo que es el mejor premio”, afirma. Con esta iniciativa, aspira a fomentar el talento literario en Carmona y ofrecer a los autores locales una plataforma desde la que puedan dar a conocer su obra.

La red de contactos que ha creado a través de las redes sociales le ha permitido “conectar con autores y lectores de toda España y algunos de estos escritores han mostrado interés en presentar sus obras en Buks”, algo positivo de las redes que le ha servido como herramienta poderosa para difundir su proyecto.

Seguir ampliándosela el catálogo

A pesar de los desafíos que supone abrir una librería en tiempos digitales, José Manuel Camacho cree firmemente en el valor de su proyecto. Además de ofrecer descuentos y talleres, está desarrollando ideas para las próximas Navidades: “La idea es regalar libros a modo de experiencias, en cajas de regalos para esos amantes de la lectura que valoran estos detalles”. Estas cajas, cuidadosamente seleccionadas y pensadas como presentes, buscan captar la atención de aquellos que desean hacer un obsequio especial.

Buks es algo que va más allá de vender libros; es un proyecto para construir comunidad, “para que la gente de Carmona tenga un sitio donde reunirse, hablar de literatura, aprender o simplemente estar juntos”, comenta. Algunos locales emblematicos del país han logrado sobrevivir adaptándose a los cambios y, aunque aún dando los primeros pasos, sigue esa senda de renovación cultural. Menciona el papel de aquellas independientes en ciudades vecinas, que a pesar de los cierres masivos de pequeños comercios en los últimos años, se han transformado en lugares de cultura y de encuentro social, con presentaciones de libros, eventos culturales y actividades.

Son ya 4000 los títulos que esta librería ofrece. MAURI BUHIGAS
El goteo de personas es constante en Buks. MAURI BUHIGAS

En la calle Real, calle que ha sido testigo de siglos de vida, Buks marca un hito, convirtiéndose en un nuevo punto de referencia cultural. No solo busca atraer a lectores, sino a todo aquel que esté dispuesto a redescubrir el placer de una conversación pausada y el valor de un espacio donde se celebran las historias. Para su dueño, José Manuel Camacho, es una apuesta para demostrar que incluso en el siglo XXI, en una era dominada por el consumo digital, los libros y las librerías siguen siendo esenciales para la vida de una comunidad. Apartarse del mundanal ruido, saborear un café mientras te evades sumergido entre historias, aventuras o poemas. Y es que todo está en los libros.