Una de las últimas películas que Ángeles Fernández Serrano vio con su marido, antes de fallecer, fue Regreso al futuro. Por eso, cuando decidió expresar en un libro de poemas sus sentimientos, durante la pérdida y el duelo, tuvo claro que quería usar el seudónimo de Martina McFly, en honor al protagonista de la historia —en versión feminizada—.
De su dolor, del duelo pasado desde que hace cinco años se marchara Sergio, su marido, sale el libro de poemas El miembro fantasma. El concepto del título se refiere al sentimiento que tienen las personas a las que se les ha amputado una extremidad, quienes después de perderla siguen sintiendo que sigue ahí. Así se ha sentido Ángeles. O Martina. Lo mismo da.
La autora, pedagoga de profesión, escritora por devoción, siempre ha hecho sus pinitos. "Desde pequeña". Durante su infancia, todo tipo de relatos. La poesía llegó durante la enfermedad de su marido. "Ahí descubro que la poesía me ayudaba mucho como proceso terapéutico", comenta a lavozdelsur.es. "Empecé a escribir y, cuando falleció, me siguió acompañando".
Lo hace a diario. Cuando le viene la inspiración. Y comenzó a compartirlo en sus redes sociales, donde tuvo el primer contacto con sus lectores. Fueron sus amigos quienes la animaron a recopilar sus creaciones y convertirlas en libro. Eso ha hecho en El miembro fantasma, editado por Peripecias Libros, y presentado recientemente en Cádiz.
"Notaba cómo me ayudaba a sobrellevar el proceso del duelo. Y hoy en día lo sigue haciendo. Hace cinco años que falleció y, en realidad, esto no acaba nunca de irse. Aprendes a integrarlo en tu vida y a convivir con ello", comenta Martina McFly, que hace con su libro un "homenaje" a su marido, pero espera que sirva a quienes lo lean y estén pasando por alguna "fase oscura" a asimilar el dolor.
"Sergio me comentó poco antes de su fallecimiento que creía que alguna forma de realidad paralela, de otro espacio, podría existir, y que de alguna forma nos volveríamos a encontrar", asegura Ángeles Fernández, o Martina McFly, que escribe una obra en la que sobrevuela la sensación de que el tiempo no es lineal, como en la película que da nombre a la autora.
"He hecho un símil con Marty McFly y la capacidad que tiene de viajar en el tiempo y lo comparo con la capacidad que tiene cada uno de pasar por etapas, de recordar cosas, de volver hacia delante o hacia atrás, de hacer viajes en el tiempo de una manera figurada, lógicamente no real, con la idea de que el tiempo no es lineal", explica Ángeles.
El libro está dividido en tres partes. La primera se titula Acogida (todo se volvió raro). En ella los poemas reflejan el impacto inasumible de la muerte de una persona de 44 años. Transición (Anotaciones en el diario de campo) es la segunda parte, y discurre a través de reflexiones en las que influyó la etapa del confinamiento por el coronavirus. La tercera, Acomodación, deja ver "una etapa algo más luminosa, aunque noto que siempre estaré en tránsito, mi viaje no ha finalizado".
El libro, en continua construcción durante los cinco años que transcurren desde la muerte de Sergio, refleja el proceso que ha vivido Martina McFly, sacando a la luz "cosas que a veces están en la sombra", de las que ella misma no era consciente, y dejando entrever "una evolución tanto personal como estilística".
Con la pandemia, después de que su marido se marchara, Ángeles sacó a la luz a través de redes sociales su escritura, que siempre había guardado para sí misma. "Ahí descubrí que a la gente le gustaba y dije anda, no voy a ser tan mala como yo pensaba", bromea. Pero luego fue más allá, y pensó en que podía haber a quien no solo le gustara, sino que "le viniera bien" porque se sentía reflejado en sus poemas.
"Espero que el libro pueda beneficiar a quien esté pasando por un momento más triste o más oscuro, porque en el fondo lo que trasluce es la esperanza final. A mí no me gusta dejar el final negro, no soy así. Mi naturaleza es optimista, por lo que intento transformar lo feo en algo bello a través de las palabras", sostiene la autora.
Con este libro, Martina McFly entiende que llega a un "cierre de ciclo". Ahora le apetece "explorar la poesía desde otro punto de vista, no tanto desde el dolor o la pérdida, sino desde aspectos que no sean tan introspectivos. Quiero mirar más hacia fuera", dice la autora, que asegura que, es el primero, pero no será su único libro. Una vez desprendido el "miedo inicial" a hacer públicos sus escritos, no descarta nada.
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