Rosario Toledo busca la esencia de su baile y exhibe su “particular e intransferible” materia artística de la que está hecha por dentro. Y nada mejor que titular esta búsqueda como ADN, espectáculo que podrá verse mañana martes día 24 de febrero en Sala Paúl dentro del ciclo ‘Con nombre propio’ del XIX Festival de Jerez. De otro lado, la algecireña Noelia Sabarea pondrá en escena Flamenco, flamenca en Sala Compañía.
“¿Quién soy, cuál es mi sello? ¿Qué es lo genuino en mí, lo que me hace única?”, se pregunta Rosario Toledo. Y ella misma llega a la respuesta inevitable: “la personalidad artística viene determinada por muchos factores”. En este saco de circunstancias aparecen sus vivencias, la época histórica en la que le ha tocado vivir, así como el lugar donde va transcurriendo su vida. “Uno puede huir de muchas cosas, renegar de otras, pero no se puede escapar de lo que uno es”.
Lo que “uno es” viene de alguna manera marcado por su condición de mujer bailaora de principios de este siglo “y la herencia de Cádiz en cada poro de su baile”. En este ADN así se pone de manifiesto. Esa herencia geográfica se resalta en el elenco artístico que le acompaña al cante: Juan Villar y David Palomar, que pertenecen a dos generaciones distintas del más puro estilo gaditano. “Uno es la jondura y el otro hace de contraste en el escenario”, según Toledo. Todo ello aderezado con la guitarra de Rafael Rodríguez y Periquín Niño Jero, así como la percusión y las palmas de Roberto Jaén.
Con semejante cuadro artístico el baile de Rosario Toledo también rezuma de ritmos gaditanos tanto por alegrías como por taguillos o palos de ida y vuelta como la milonga. Soleares, fandangos y caña también tendrá el sabor de este rincón de Andalucía en las voces de Villar y Palomar. Acaba la propuesta de Rosario Toledo con unas bulerías que lleva por nombre La fuerza de las raíces, por si había alguna duda de dónde viene su estética bailaora.
“Es un reconocimiento a mi verdad. He querido reconocerme a mí misma”, explicó ante los medios de comunicación. A su juicio, su propuesta se presenta como “una victoria y una forma de decir ‘vamos pa lante’, siempre con una sonrisa y mejor que en el pasado”. La puesta en escena de ADN es “sencilla, limpia e intensa”, según Ana López Sevilla, responsable de esta parcela. “Estamos ante un espectáculo planteado con humor pero, al mismo tiempo, con jondura y vida por todos los lados”, precisó. Además, desveló que el hilo argumental de esta propuesta contiene sentimientos que van desde el desamor hasta la reconciliación y despedida, pasando previamente por la nostalgia y la soledad.
La trayectoria artística de Rosario Toledo cuenta ya en su haber con una importante lista de trabajos, en los que el público ha podido apreciar la intuición, frescura y expresividad de su baile. En 2011 estrenó en el Festival de Jerez Hay fuego en tus ojos, al que luego le siguió el espectáculo de calle Vengo y Pintoresca, que puso en escena la última edición de la Bienal de Sevilla. Ahora, con ‘ADN’, quiere averiguar “en medio del caos qué es ser, en este momento, baila-ahora”. Es decir, una mujer de su tiempo y con Cádiz como referencia.
De otro lado, en Sala Compañía, Noelia Sabarea presentará su Flamenco, flamenca, dentro del ciclo ‘De la raíz’. “Intentaré introducir al espectador en un océano de sentimientos”, asegura la bailaora algecireña. Para ello, contará con el cante de Esperanza León y Manuel Peralta, a los que se suman las guitarras de Daniel Casares y José Manuel León y la percusión de Antonio ‘El Schuster’. “Un canto a la figura de la bailaora en íntimo maridaje con el flamenco”, indicó Sabarea. “Lo que siento, mi pasión por el baile pero desde un punto de vista tradicional”, añadió sobre su Flamenco, flamenca. Bailará por seguiriyas, alegrías y bulerías, entre otros palos. “He cumplido el sueño de estar en Jerez” y espera que el público “se sienta identificado” con lo que hará sobre el escenario.