Lo único que hace a Virginia Reguera (Jerez, 1956) dejar atrás el estrés de su profesión, ser sanitaria en mitad de una pandemia, es sentarse a escribir. Esta alergóloga jerezana, con más de 30 años de experiencia a sus espaldas, cumplirá un "sueño" el lunes 14 de diciembre: presentar su primer libro. La obra, llamada Microestesia, recoge una serie de microrrelatos escritos durante los últimos años y recopilados para la ocasión. Lo hará en la Fundación Caballero Bonald, a las 19:00 horas, con la presentación de Claudia Capel.
"Es un sueño", repite Reguera, que rebosa de "ilusión". "Lo veía muy lejos y ya es una realidad", dice. "Durante confinamiento ordené y arreglé los microrrelatos que ya tenía escritos", cuenta. "Hay algunos sobre medicina, pero versan sobre cualquier tema, hay otros inspirados en temas bíblicos... Son cosas que me brotan", añade la doctora, que lleva desde 2015 escribiendo microrrelato. "Conocí este género por mi hija y empecé en los talleres de la Fundación Caballero Bonald", relata, "y me encantó porque se ajusta a mi manera de ser".
Microestesia recoge sus creaciones de los últimos años. "Llegó un momento en el que tenía tantos que podía hacer un libro, pero nunca piensas en eso", sostiene. Desde la fundación le dieron el empujoncito que necesitaba. "Nunca he presentado un libro y estoy muy ilusionada", dice. Sus microrrelatos beben de sus vivencias, pero también deja lugar a su imaginación, alimentada por muchos años de lectura. "Escribir me gusta desde que era pequeña", rememora Reguera. "Dio la casualidad de que con seis años tuve una enfermedad que me tuvo mucho tiempo en cama y me entretenía mucho leyendo. Mi madre no sabía ni qué darme para leer. Y empezar a escribir viene de la mano". De pequeña, hasta le escribía las redacciones a sus amigas del colegio, recuerda entre risas.
Virginia Reguera es alergóloga desde 1987, y desde entonces ha trabajado en Las Palmas, Murcia, Granada o Madrid, antes de recalar en su Jerez natal —"en Andalucía no había plazas"—. "Ahora escribo para desahogarme", expresa la doctora, que relata que vivió la primera ola de la pandemia con "mucho miedo". "Tengo claro que soy médico y voy a estar al pie del cañón, eso no es cuestionable, pero se sabía tan poco del virus... Es algo que no controlas y sientes temor por la responsabilidad que tienes". El coronavirus y sus vivencias, de hecho, las refleja en otros microrrelatos que ha escrito estos meses.
Los textos de Reguera recogen su angustia, sus inquietudes, sus miedos... pero también tienen humor. "Para mí es muy importante. Aparte del drama, el humor no me falta nunca, siempre está presente siempre si lo sabes ver", dice. "No lo he llevado muy mal a pesar de todo", expresa, "sin contar los primeros días en los que temía verme envuelta en situaciones que no iba a saber resolver, porque no soy especialista en infecciosas". "Lo que más me pesaba responsabilidad de querer hacerlo lo mejor posible".
"Escribo siempre. Es raro que no escriba. Y si no escribo, estoy pensando en lo que voy a escribir, pensando historias", dice esta alergóloga a la que los microrrelatos la ayudan a sobrellevar este duro 2020. El lunes 14 de diciembre, a las 19:00 horas, en la Fundación Caballero Bonald, presenta su primera obra pero, seguramente, no la última.