El ‘Vente pa Jerez’ celebró su tercera edición en la Sala Paúl con precios populares, un recital poético y conciertos a cargo de Diego Pozo, Dani Bigfu, Miguel ‘Jiman’ o El Capullo de Jerez, entre otros.
La Sala Paúl abre sus puertas a las 12 del mediodía. Un año más, esta vez en este espacio juvenil del Ayuntamiento de Jerez, vuelve a celebrarse el ‘Vente pa Jerez’, un encuentro que agrupa a seguidores de Migue Benítez y del sentimiento garrapatero. Se canta, se toca y se baila. El ‘Vente pa Jerez’ es una fiesta. Cerveza en mano, varios grupos de garrapateros desenvuelven sus guitarras y comienzan a entonar canciones de Los Delinqüentes. Mientras algunos se acercan a curiosear por la exposición dedicada a Migue, otro grupo canta “si pierdo yo el sufrimiento y el alma de ceniciento, las penas del pensamiento se me van como vinieron... nubes de pegatina, farolas de serpentina, marinero de los mares con las olas de cartulina”. En corrillos, los garrapateros resucitan a Migue: ¡Viva ‘el Migue’! Y contestan: ¡Viva! En el interior la exposición recoge fotografías, dibujos, cuadros y todo tipo de recuerdos en homenaje al artista jerezano, que falleció hace ya doce años.
El ‘Vente pa Jerez’, asegura su propio promotor, Manu Benítez –hermano de Migue-, nació en respuesta a una demanda que hubo cuando se cumplieron diez años de su fallecimiento. “En 2014 respondimos a esa necesidad, se formaron numerosos grupos en Internet que reclamaban su recuerdo. Ver cómo se comparte ese sentimiento es superespecial”, señala. “El abanico de Migue era muy grande, era un creador, constantemente veía en todas las músicas que llegaban herramientas de expresión... yo soy su hermano y me muerdo la lengua para no decirlo pero, ¿cómo puede alguien con tan sólo 15 años escribir las cosas que escribía?”. Le preguntamos por el sentimiento garrapatero: “¡Migue no tenía tapujos para nada! ¡Todo lo que le rodeaba para él era poético! Los bichos, las garrapatas, lo que se comiera... una berza, todo eso. Lo bonito que viviera y lo malo que viviera. Un desgarro amoroso, la pérdida de un ser querido...”.
Es hora de tapeo y los asistentes pican en el bar de la Sala Paúl platos jerezanos como la carne en salsa o la pringá. Algunos aprovechan para tomar unos vinos. El recital poético comienza a las cuatro de la tarde, los garrapateros más incondicionales se suben a un escenario improvisado contiguo a la exposición. Durante más de dos horas todo tipo de canciones, poemas y dedicatorias salen a la luz.
A las siete de la tarde el auditorio de la Sala Paúl abre sus puertas. Llegan los conciertos. Desde Alicante, Malos Ingredientes hacen tributo a Los Delinqüentes. Salen al escenario con pretensión de no defraudar, “como os gusta a vosotros”. El plato fuerte llega con la aparición de Niño Libre, con Miguel Jiman, Kiko Tiburón y Fran Orellana, que provoca la euforia de los asistentes. “Qué buenos son”, comenta un aficionado. Miguel ‘Jiman’ Carabante también acompaña a Diego Pozo, el ‘Ratón’, en un particular homenaje a Los Beatles (Ratón & Bigfut´s Pepper Band), con Dani Bigfu y otros músicos como Nacho Salmerón. La aparición de El Capullo de Jerez no dejó indiferente a ningún garrapatero, “a Migue le encantaba”. El Capullo, acompañado por un nutrido grupo de artistas, se dejó notar e hizo vibrar la Sala Paúl. La aparición de Las Gipsy Rock, con Malena Jiménez y Sonia Molina al cante, acompañados de La banda del Ratón, con Diego Pozo como ‘padrino’, tal y como ya hizo prever la organización, puso el broche de oro al tercer año del ‘Vente pa Jerez’.
A Manu Benítez le preguntamos por el futuro de este encuentro garrapatero: “El ‘Vente pa Jerez’ se va a seguir haciendo. Es que yo creo que si yo dijera que no se hace, la perspectiva es que se hace; si yo no lo hago me van a decir que venga y que lo disfrute. La Sala Paúl tiene todas las papeletas el año que viene. Si tenemos terminado el documental sobre Migue –El Hierro Oxidao-, me encantaría estrenarlo en el Villamarta e irnos allí, pero es un sueño”. Sonríe y se imagina “un estreno y al día siguiente un día de campo, con una berza, en una choza o algo así... muy campero, muy garrapatero”.
Por último, le pedimos un mensaje para los garrapateros del mundo: “¿Un mensaje? Bueno, pues que nos llega el cariño que nos transmiten, que sin ellos no tendría fuerzas para seguir trabajando en la obra de Migue”. Se emociona y deja entrever una sonrisa tras un profundo gesto de tristeza: “A veces es muy complicado, se le echa mucho de menos, es difícil abrir un vídeo. Otras veces pienso que nunca podré volver a trabajar con alguien como Migue. Me motiva mucho seguir trabajando con él. Y lo hago porque hay un público de primera división. Sabes que aunque incluso seamos aquí pocos, hay un montón de gente por el mundo entero que le gustaría estar aquí. Recibimos saludos de Uruguay, de Colombia, de Argentina... es muy fuerte porque él no está y es como si estuviera en verdad. Sientes ese amor y ese cariño de la gente”.
Escucha la entrevista a Manu Benítez