Luto en el mundo del fútbol tras la muerte de un portero tras detener un penalti. Los compañeros de Arne Espeel, meta de 25 años del Winkel Sport de Bélgica, pasaron en cuestión de segundos de la alegría al llanto.
Durante el transcurso del encuentro, el colegiado decretó una pena máxima. Espeel la detuvo, pero tras su parada cayó desplomado al suelo al intentar hacerse con la pelota. A pesar de los intentos de los jugadores de ambos equipos, no lograron reanimar al arquero.
Los servicios de emergencia tampoco pudieron, tras media hora intentándolo, hacer nada por salvar la vida del joven guardameta.
"Ha sido terrible", han señalado testigos directos de la muerte en el terreno de juego del cancerbero. Su equipo se encuentra totalmente conmocionado tras esta luctuosa noticia