El sueño de Carlos Alcaraz se ha hecho trizas este domingo en la final de tenis individual que se ha disputado en la Philippe Chatrier en los Juegos Olímpicos de París 2024. Había ganado el Roland Garros y Wimbledon y ya había hecho historia al asomar la cabeza en la final. Sin embargo, el veterano Novak Djokovic, el segundo del mundo, le ha parado los pies al joven de 21 años que aspiraba a convertirse en el oro olímpico más joven del mundo.
El serbio de 37 años está en una nube tras demostrar su destreza en una competición que se ha saldado con 7-6 (3) y 7-6 (2) en unas tres horas. El español lo seguirá intentado en Los Ángeles en 2026, al igual que su contricante lo la luchado en cinco ocasiones.
El tenista no ha podido contener su emoción al hacerse con la victoria y lo primero que ha hecho ha sido arrodillarse, santiguarse y dar gracias a Dios.
Djokovic lleva desde 2008, cuando logró el bronce en los juegos de Pekín tratando de hacerse con el oro. A la quinta va la vencida para este tenista con una carrera brillante que quedó en cuarta plaza en Londres 2012, primera ronda en Río de Janeiro 2016 y cuarta plaza en Tokio 2020.
Este domingo se ha convertido en uno de los cinco jugadores en la historia que han completado el Golden Slam. El oro olímpico era el único título que le faltaba para confirmar, una vez más, su trayectoria excepcional.