Al menos tres muertos y seis heridos ha dejado un hombre armado que se ha puesto a disparar en un edificio del centro de Auckland, una de las sedes del Mundial femenino que ha dado comienzo este jueves con el partido inaugural entre Nueva Zelanda y Noruega.
El tiroteo ha tenido lugar a pocos metros del hotel donde se alojan algunas selecciones como la de Estados Unidos, una de las grandes favoritas. El pistolero, de 24 años de edad, entró en un rascacielos que se encuentra en construcción y en el que trabajan unas 200 personas.
Las primeras informaciones apuntan a tres muertos, entre los que podría encontrarse el propio asaltante. Numerosos equipos de emergencia se han desplazado hasta la zona.
"Es una situación terrible que llega en el peor momento, cuando el mundo tiene sus ojos puestos en nosotros. Nunca antes había tenido un incidente como éste, ha señalado Wayne Brown, alcalde de Auckland, a TVNZ.
El primer ministro de Nueva Zelanda, Chris Hipkins, ha señalado que "no existe una amenaza más amplia para la seguridad nacional. Esta parece ser la acción de un individuo aislado".