Kenzo, un niño francés de ocho años que padece cáncer cerebral, acudió este fin de semana al estadio del Ajaccio, que se enfrentaba al Olympique de Marsella en el último partido de la Ligue 1. El pequeño es seguidor del Marsella, y estuvo junto a su padre en el Stade Francois Coty del Ajaccio, donde vivió unos "actos indescriptibles", según denuncia el propio club.
En el campo, Kenzo y su padre fueron atacados por seguidores radicales del Ajaccio, llegando incluso a propinarle varios puñetazos a su progenitor, como cuenta el diario Mirror. Al niño le arrancaron la camiseta que llevaba, que fue quemada por los radicales del club francés.
"Golpearon a mi esposo en la cara, le arrancaron la camisa al pequeño y fueron a quemarla. Antes de salir del vestuario, incluso escupieron en la comida que estaba en el suelo a nuestra disposición. Kenzo es muy consciente de que está muy enfermo, está perdiendo la vista debido a su tumor y me dijo: Antes de no ver nada más, quiero ver a OM en Ajaccio... Estos tontos lo traumatizaron", cuenta Amandine, la madre del pequeño.
El Ajaccio, en un comunicado, lamenta lo sucedido: "El pequeño Kenzo, que sufre de cáncer, había expresado su sueño de conocer a los jugadores del Marsella, el club de su ciudad y su corazón. Kenzo y su familia fueron invitados para que el niño pudiera realizar su sueño durante el partido de esta noche. El sueño se convirtió rápidamente en una pesadilla cuando Kenzo y sus padres, que llegaron con los colores de Marsella, fueron abusados vergonzosamente por individuos que irrumpieron en su vestuario", relata el equipo.
"Estas personas de ninguna manera representan los valores de nuestro club y nuestra isla. ¡Incluso la estupidez más extrema no puede excusar estos comportamientos! ¡El club condena enérgicamente estos actos indescriptibles! AC Ajaccio arrojará toda la luz sobre estas acciones vergonzosas. Tan pronto como las personas hayan sido identificadas por nuestros servicios, presentaremos una queja contra ellas", apunta el club.