El estadio municipal de Cádiz volverá a llamarse Carranza. O, más bien, ahora se llamará Estadio Carranza, y no Ramón de Carranza, clave en todo el devenir de los últimos años. El Ayuntamiento ha anunciado, sin que se esperase activar el asunto, que va a iniciar los trámites para el cambio de denominación del estadio municipal.
En una nota de prensa, el gobierno municipal explica que ha recibido un escrito del Cádiz CF por el que se solicita "el cambio de nombre del Estadio Nuevo Mirandilla para que pase a denominarse Estadio Carranza". Y que "una vez recibido el escrito, el Ayuntamiento de Cádiz va a iniciar el proceso administrativo para proceder al cambio de nombre del recinto deportivo municipal".
Así, el Ayuntamiento de Bruno García acepta de plano la postura de la entidad cadista, que argumenta en su escrito que "el nombre Carranza aúna de manera mayoritaria la identidad y la memoria colectiva del cadismo y reúne todos los requisitos legales para proceder al cambio de denominación".
"El Cádiz Club de Fútbol tiene registradas las marcas Estadio Carranza y Trofeo Carranza a secas desde 2021", añade el Ayuntamiento. "El Ayuntamiento de Cádiz iniciará el trámite para la adopción de ambas denominaciones. De este modo, la LXX edición que se jugará el próximo 10 de agosto ya pasará a denominarse Trofeo Carranza".
El proceso para el cambio en el Trofeo Carranza concluirá de forma inmediata, aunque para el cambio de nombre del campo de fútbol municipal sí habrá un proceso administrativo. Fuentes municipales no precisan sobre cuánto tiempo tomará, aunque todo apunta a que no será tan dilatado como el proceso para tomar el nombre Nuevo Mirandilla, que ocupó buena parte del segundo mandato de José María González.
Esta decisión implica una postura, que es que no habría ningún problema con la normativa vigente sobre memoria democrática, y sobre la que el Cádiz CF y otros colectivos de la ciudad se basaron para rechazar la decisión del anterior gobierno municipal.
La clave, a nivel jurídico, está en la figura de Ramón de Carranza. Tras el golpe de Estado de 1936, fue nombrado alcalde de Cádiz, cargo que ostentó durante un año, además de gobernador civil. La tesis sería que llamarlo Estadio Carranza "a secas", como defiende el Cádiz CF y reproduce el Ayuntamiento en su nota de prensa, no implicaría per se una defensa de la figura personal de Ramón de Carranza, sino una asimilación porque "aúna de manera mayoritaria la identidad y la memoria del cadismo". Es decir, el hecho de que haya sido denominado popularmente como "el Carranza" -hay que subrayar, "a secas", sin el 'Ramón de' inicial- durante décadas, habilitaría para que no fuera rechazable en base a las leyes de memoria democrática.
Ahora, está por ver si hay entidades o ciudadanos de Cádiz que pongan reparos legales a este cambio de nombre del Estadio. Una batalla que primero podría darse en el ámbito administrativo -con objeciones al expediente-, y saltar, potencialmente, al ámbito judicial, para dirimir si Estadio Carranza es o no contrario a las leyes sobre memoria.
El alcalde de Cádiz, Bruno García, se había mostrado algo esquivo con el asunto, que marcó el citado segundo mandato en el poder de Kichi. Toca varios asuntos sensibles, como el tema del fútbol, pero también de memoria democrática. Un año después de llegar a la Alcaldía, el PP recupera el nombre, aunque insistiendo que lo hace a petición del equipo.