El ambiente de diálogo y colaboración que presidiera el relevo en la Alcaldía de Cádiz, hace exactamente un mes, se ha evaporado por efecto del calor, la campaña electoral y las posibles negligencias en la gestión del equipo de gobierno saliente.
Por segunda vez en este mes de julio, el alcalde Bruno García ha denunciado con documentación oficial una hipotética pifia burocrática del gobierno formado por José María González Santos, Kichi.
En este segundo caso, el punto de choque ha sido la falta de organización de la Gran Regata 2023. La inacción y los retrasos de los anteriores concejales la habrían puesto en peligro, según denunció este jueves en la presentación del evento el alcalde Bruno García.
"En la Gran Regata no se ha hecho nada, tenemos que partir de cero, con el viento en contra"
Acompañado por su valedora y presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, Teófila Martínez, el regidor utilizó expresiones como “partir de cero”, “no se ha hecho nada” o "tenemos el viento en contra” para resaltar que la previsión ha sido desastrosa durante la primavera, hasta comprometer la celebración de la cita náutica prevista en apenas 45 días, entre el 7 y el 10 de septiembre.
Esta declaración provocó la inmediata respuesta de los herederos políticos de Kichi, Adelante Izquierda Gaditana, que niegan la acusación y achacan al nuevo alcalde pocas ganas de pelear por la organización de la cita y mucho empeño por atacar a sus predecesores. La oposición culpa igualmente al alcalde del Partido Popular de anunciar una Gran Regata 2023 con 15 grandes veleros cuando estaba prevista la participación de más 30.
Bruno García: "Nosotros hemos aportado datos; Adelante, insultos"
Bruno García decidió elevar este viernes el tono de la disputa. Acudió a la Junta de Gobierno Local con un documento firmado por el gerente del Instituto Municipal del Deporte. Según ese escrito, el día 17 de junio en el que se produjo la toma de posesión del alcalde, apenas tres meses antes de la celebración de la Gran Regata, “no había expediente alguno para la contratación de obras o infraestructuras en el puerto”, ni “convenios o contratos con entidades ni empresas”.
El nuevo alcalde añadió un argumento a la ampliación de su denuncia: la “falta de respeto a los técnicos” municipales que supone dudar de su testimonio y obligarles a redoblar esfuerzos para cumplir con los requisitos de la organización de un evento con tanto retraso acumulado.
“Nos ha pasado con la Edusi. Nosotros hemos aportado datos y documentos; Adelante, insultos. Quizás tengan que hacer algo de autocrítica para entender por qué están ahora en la oposición”, declaró Bruno García.
El precedente Edusi
El primer episodio tuvo como centro de la discusión pública los fondos europeos Edusi. El nuevo regidor, en una visita rutinaria a unas obras, aseguró que hasta cinco millones de euros de los 18,7 enviados por la Unión Europea en distintos proyectos de mejora urbanística y tecnológica, en inmuebles o equipamientos, tendrían que ser devueltos por incumplimiento.
El motivo alegado por García de León es que dos de esos proyectos no pueden ser siquiera licitados porque el plazo de ejecución acaba el 31 de diciembre. Otros tres van muy retrasados aunque se confía en acelerar su ejecución. El nuevo alcalde dejó caer un primer reproche al afirmar que en las reuniones entre Partido Popular y Adelante Izquierda Gaditana (AIG) “nadie dijo nada” sobre ese alarmante atraso.
El partido en la oposicion achaca al nuevo alcalde “poca sangre” y le acusa de “tirar la toalla” cuando hay tiempo para ejecutar casi todos los proyectos y devolver apenas 3,1 millones si no se cumple el plazo de final de este año.
Con todo, David de la Cruz (portavoz de AIG) y su equipo aceptan de forma implícita los atrasos al anunciar que acudirán a Bruselas para solicitar una prórroga en el plazo y no perder el dinero de las ayudas.
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