El concejal delegado de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Cádiz, Martín Vila, ha informado sobre los resultados del proyecto de excavación arqueológica de las sepulturas colectivas (medias sepulturas) del cementerio de San José. Un proyecto que comenzó el 2 de marzo y finalizó el pasado 30 de junio con la localización y exhumación de un total de 24 víctimas de la represión franquista asesinadas entre 1936 y 1937.
Según ha explicado el Ayuntamiento en una nota, acompañado por el arqueólogo municipal, Pepe Gener, y el miembro de la Plataforma por la Memoria Histórica de Cádiz Antonio Chico, Vila ha expuesto las principales novedades de estas tareas que se han realizado dentro del convenio firmado entre el Ayuntamiento de Cádiz y el Cementerio Mancomunado de la Bahía de Cádiz S.A. (Cemabasa), que ha acometido esta intervención previo encargo municipal con un presupuesto de 39.802 euros.
No obstante, antes de compartir los resultados, ha agradecido tanto a Cemabasa como a todo el equipo técnico de investigación que ha estado trabajando en las labores de exhumación "el esfuerzo realizado para cumplir con la verdad, justicia y reparación, para hacer de Cádiz una ciudad más digna, dando respuesta, consuelo y paz a los familiares que siguen buscando a sus antepasados y que fueron fusilados siendo víctimas de la represión franquista entre el verano de 1936 y principios de 1937".
El edil ha precisado que en esta campaña se han excavado un total de 20 sepulturas colectivas en las que se han localizado las 24 víctimas de la represión franquista que han sido clasificadas, según las características contextuales, en tres grupos: víctimas por evidencia de arma de fuego, que han sido 13 en total; víctimas por evidencia contextual, que han sido sólo cuatro casos en los que no se ha registrado evidencias de fallecimiento por arma de fuego, pero sí datos arqueológicos y antropológicos que certifican que son las víctimas inhumadas en esa sepultura.
"En uno de los casos se plantea la relación con un represaliado que, según consta en el informe del instituto forense de 1936, fue asesinado por degollamiento. Los otros han sido parcialmente alterados por exhumaciones posteriores, destruyéndose las evidencias óseas de fallecimiento por arma de fuego o algún otro tipo de muerte violenta", ha explicado el edil.
El tercer grupo pertenecen aquellos restos óseos sin conexión anatómica, es decir, no conservan su posición original de cuando fueron enterrados, pero con fracturas en fresco provocadas de forma violenta. En total, se han contabilizado siete.
Vila ha resaltado que la individualización definitiva de los restos localizados "se realiza mediante análisis comparativo de ADN entre muestras óseas e hisopados de los familiares". Por lo tanto, a pesar de que el registro del cementerio ubica con nombre y apellidos a las víctimas, no se considera su identificación hasta que no se obtenga un resultado positivo de dichas pruebas.
Por último, el edil de Memoria Democrática ha puntualizado que ya han concluido todas las actuaciones en medias sepulturas, y que partiendo de los tipos de inhumación en el cementerio de San José quedan por ejecutar dos campañas que se centran en la finalización de la Fosa Común Norte (Patio 1), en la que queda por excavar aproximadamente una cuarta parte con una duración de mes y medio o dos meses, y una excavación arqueológica en la Fosa Sur (Patio 1).
"Hasta el momento, el número de víctimas localizadas en el cementerio San José según el tipo de enterramiento son 81, de las cuales 43 personas se han encontrado en medias sepulturas, 37 en el Patio 1 de la Fosa Común Norte y una en las tareas de indagación en la Fosa Común Sur", ha precisado.