En la sesión del domingo en el COAC, el encargado de abrirla fue el coro 'Casa Remedios esquina con Cádiz'. Una obra de dos autores con un buen historial en las tablas como José Luis Bustelo y Jesús Monje. El retraso del inicio de la sesión ya hacía presagiar algo extraño. Cuando se abrieron las cortinas, la puesta en escena descuadró al público y a los espectadores. Era complicada de entender.
Sin embargo, tras la actuación se conoció el motivo de todo ello. Uno de los autores, Monje, visiblemente emocionado destapaba la situación en los micrófonos de Onda Cádiz. Ni la puesta en escena ni los disfraces de los componentes habían llegado a tiempo. Con prisa, los miembros del coro tuvieron que improvisar tanto el tipo como el atrezzo, algo que quedó a medio hacer por la falta de tiempo y el riesgo a la penalización. Durante la entrevista se escuchaba a miembros de la tramoya avisando a los componentes para que desmontaran la puesta en escena por la falta de artesanos.
La empresa encargada de todo el montaje aún no ha trascendido. Al parecer, los motivos de la situación han sido las desavenencias con el artesano al que se le había encargado la puesta en escena. Desde el coro apuntan a que no se entregó todo lo encargado y que, además, lo que sí se recibió no fue en las condiciones pactadas.
Monje, en su entrevista en Onda Cádiz deseó que todo estuviera listo para cuartos y en la siguiente fase pudieran contar con los tipos previstos. De momento, la primera actuación ha sido salvada con lo que cada componente pudo ponerse en su casa.