Cerrado el hueco, se acabó la mugre. Tapiada la escalera, se acabó el miedo. Parece ser el resumen de la decisión anunciada por el alcalde de Cádiz, Bruno García de León, tras la última Junta Local de Gobierno.
El Ayuntamiento de Cádiz, a falta de la definitiva confirmación de las comunidades de vecinos afectadas, va a cerrar, a cubrir, la escalera pública que une la plaza Portería de Capuchinos con la calle Profesor Alcina Quesada, en el barrio de La Viña. Especialmente, los vanos y los espacios techados colindantes.
Este breve tramo de vía pública y su entorno inmediato -una de las muchas conexiones entre el viejo barrio marinero y el Campo del Sur- se ha convertido en los últimos 15 años en un punto de concentración de pequeños grupos de indigentes y personas sin hogar que, en ocasiones, incluyen a vándalos o violentos.
La última alarma saltó cuando los vecinos grabaron a una sexagenaria que agredía con una muleta a otros concentrados en la zona
Las escenas que han tenido que soportar los vecinos, con pocas treguas desde 2008, incluyen a hombres y mujeres, adultos o ancianos, dejando excrementos y vómitos, objetos utilizados para el consumo de drogas o todo tipo de restos de bebida y comida.
También es habitual, según admite el alcalde, alguna escena de "trapicheo". Las peleas se han vuelto frecuentes entre los que acampan allí cada tarde o con los vecinos que les reprochan su actitud, a los que han llegado a intimidar y amenazar.
El enésimo episodio de alarma -han sido decenas en los últimos 15 años- saltó este mes de febrero de 2024, cuando varias televisiones nacionales emitieron imágenes grabadas con los teléfonos de los vecinos.
En esos vídeos se veía a una mujer, madura, levantarse de una silla de ruedas y enfrentarse con una muleta a otros indigentes y a vecinos. Alrededor, cartones, mantas sucias y excrementos de la noche anterior.
El alcalde de Cádiz admite la desesperación que provocan los graves problemas de convivencia a los vecinos de la zona al reconocer que está al tanto de la situación "desde hace 12 años, cuando yo era concejal de Fomento" en el gobierno municipal de Teófila Martínez.
Los vecinos de la zona soportan desde 2008 los insultos y amenazas de los vándalos cuando les recriminan su actitud
Aunque el acuerdo de cierre del espacio público no está confirmado aún por todas las asociaciones y comunidades de vecinos implicadas, Bruno García afirma que se ha avanzado hacia una mayoría muy notable acepta esta solución.
El regidor admite que alcanzar ese entendimiento "no era fácil" porque hay muchas personas afectadas y con distintas motivaciones a la hora de apoyar o rechazar la eliminación de un tramo de vía pública, un acto que no deja de ser un gesto de resignación, una pequeña derrota.
La confirmación definitiva, asegura el Ayuntamiento de Cádiz, llegará tras la Semana Santa. La decisión de cerrar no supone, según el alcalde, desplazar sin más a los vándalos y los violentos, ni a las personas sin hogar que no provocan ninguna molestia, a cualquier otro lugar cercano, como el colindante Albergue Municipal de la plaza Macías Retes.
"Atender a las personas sin hogar es nuestra prioridad y no hay fórmulas mágicas, estamos invirtiendo en recursos, pero hemos encontrado que el Albergue Municipal, por ejemplo, está en una situación lamentable", añade García de León antes de anunciar una "reforma integral" de ese espacio, apenas a 50 metros del tramo de escalera pública que va a quedar cerrado en La Viña.
Así, asegura que los equipos de atención a pie de calle han pasado a trabajar en doble turno, mañana y tarde, cuando hasta ahora solo lo hacían por la mañana. Igualmente, el alcalde recuerda que las personas sin hogar reciben ahora un servicio de asistencia legal, podología y peluquería. Igualmente, recuerda la existencia de un área de traducción e intérpretes, puesto que muchos de ellos son extranjeros y no hablan Español.